River le ganó 3-0 este sábado a Banfield en un partido correspondiente a la vigésima fecha de la Liga Profesional, jugado en el estadio Monumental.

Pablo Solari convirtió dos goles para el Millonario, mientras que el colombiano Miguel Angel Borja, que ingresó en el complemento, marcó el tercero. Para el Taladro descontó Leandro Garate, de penal.

Desde el inicio, la superioridad del equipo de Marcelo Gallardo fue clara, pero la falta de contundencia y claridad para resolver las situaciones de peligro hacían que el encuentro se mantenga igualado ante un Banfield que esperaba agazapado.

El gol para el local llegó antes del descanso, cuando Solari recibió una pelota en el borde del área y, con un gran control, sacó un remate de media vuelta que se coló en el ángulo superior izquierdo del arco de Facundo Sanguinetti, y rompió una racha de 300 minutos sin convertir.

El complemento comenzó de la misma manera: apenas después del saque del medio, Solari ganó una pelota sobre el costado derecho del mediocampo, jugó con Claudio Echeverri y fue a buscar la devolución, para luego rematar y marcar su segundo gol.

Encendido por los goles, el Millonario tuvo sus mejores minutos del partido y pudo haber ampliado la diferencia con un remate de tres dedos de Facundo Colidio, después, con una picadita del "Diablito" Echeverri que se fue alta. Banfield no lograba hacer pie.

Sin embargo, con el correr de los minutos el trámite se emparejó y el Taladro tuvo la chance de descontar con Ignacio Rodríguez, pero su remate no pudo vencer a Franco Armani.

Luego vino la primera polémica. Rivera cayó derribado en el área y reclamó una infracción de Maxi Meza, el árbitro Sebastián Martínez fue a revisar al VAR y no cobró la pena máxima. Minutos después, una falta de Adam Bareiro sobre Agustín Obando terminaría en un penal para el conjunto de Munúa y Garate lo cambió por gol.

El Taladro pareció ganar vida tras el gol y el encuentro se puso complicado para River. Sin embargo, ya sobre el tiempo de descuento, el colombiano Borja se encontró con una pelota tras un intento de Gonzalo Martínez y le rompió el arco a Sanguinetti para marcar el 3-1 y festejarlo con toda la bronca tras haber sido algo silbado por la gente.