Unos 18 relatores especiales y expertos de Naciones Unidas remarcaron que si bien la reciente condena a dos expolicías por el asesinado de la concejala de Río de Janeiro Marielle Franco y su conductor es un hito en la lucha contra la discriminación y la violencia "todavía no se ha hecho completamente justicia".

"Es un importante cambio de rumbo, pero la lucha por la justicia no ha terminado. Otros perpetradores involucrados en la planificación y ocultación de esos asesinatos deben rendir cuentas", detallaron los especialistas.

Por ello, "las investigaciones deben continuar con arreglo a los estándares internacionales", añadieron los expertos, entre ellos la relatora sobre violencia contra la mujer, Reem Alsalem, y su homólogo sobre ejecuciones extrajudiciales, Morris Tidball-Binz.

Con todo, dieron la bienvenida al veredicto, subrayando que "da esperanza a las víctimas de discriminación estructural y violencia en Brasil".

"También es importante en la lucha más amplia contra la extendida impunidad en Brasil", agregaron.

El crimen

Marielle Franco y su conductor, Anderson Gomes, fueron asesinados a tiros en 2018, y los autores confesos del crimen, Ronnie Lessa y Élcio Queiroz, fueron condenados el pasado 31 de octubre a 78 y 59 años de prisión, respectivamente.

La concejala, militante del Partido Socialismo y Libertad (PSOL), destacó por ser una enérgica defensora de los derechos humanos y por luchar contra los grupos mafiosos que dominan las empobrecidas comunidades de Río.

"Denunció el racismo y la discriminación estructurales, así como la brutalidad policial. Ella misma sufrió la misoginia, el racismo, el clasismo y los prejuicios basados en la orientación sexual", recordaron los expertos en su nota.