Desde Francia

El negacionismo de los crímenes de la última dictadura argentina instalado por el gobierno de Javier Milei cuando se refiere a las torturas como "excesos" o pone en duda la cifra de desaparecidos; la militancia por la liberación de los genocidas de parte de la vicepresidenta Victoria Villaruel y la desafortunada visita de seis diputados libertarios a condenados por crímenes de lesa humanidad en Ezeiza, entre los que figuraba Alfredo Astiz y a quién definieron como "excombatiente" en la lucha contra el marxismo, ha tenido un impacto profundo no sólo en Argentina sino a nivel internacional.

Este último episodio terminó por movilizar a los familiares franceses de los desaparecidos en la última dictadura en Argentina, que pidieron una cita al presidente de la República Emmanuel Macron, para que la promesa de anteriores gobiernos galos de que "Francia no olvida", las víctimas francesas de la última dictadura argentina, no caiga en saco roto.

Las familias de franceses desaparecidos nucleados en la Asociación de Padres y Amigos de Franceses Desaparecidos y Detenidos en Argentina y Uruguay, fundada en 1976, junto a la abogada de familiares de franceses desaparecidos en Argentina, Sophie Thonon y otros familiares, se presentarán en el Elíseo este jueves 7 de noviembre a las 16. El encuentro no será con el presidente Macron, sino con el consejero del presidente, Walid Fouque, para Asia, Américas y Oceanía.

El gesto del Elíseo de recibir a los familiares de desaparecidos, se puede interpretar como una señal de que Macron evalúa tocar el tema en su próxima entrevista con Milei, prevista para el 16 de noviembre en Buenos Aires.

Jean-Pierre Lhande, presidente de la asociación de familiares franceses desaparecidos en Argentina, adelanta que expresará al consejero de Macron su preocupación: "Tenemos miedo que Milei abra la puerta a los genocidas", aseguró. También Lhande transmitirá al gobierno de Macron la idea de que impulse la extradición de Alfredo Astiz a Francia; y se ilusiona con las revelaciones que podría hacer Astiz que permitirían encontrar algún desaparecido o denunciar a algún responsable de crímenes de lesa humanidad que continúe impune. También los familiares pedirán que Francia presione al gobierno de Milei para impedir las prisiones domiciliaras de los genocidas presos.

La esperanza de los familiares, indignados por las políticas de impunidad que impulsa la gestión de Milei, es que Emmanuel Macron, presidente del país que dio a la luz la célebre Declaración de los Derechos del Hombre y el Ciudadano obre en consecuencia.