El Jefe de Bomberos de la Policía de Salta, Aníbal Rodríguez, informó que al menos 160 de los 600 puestos del Mercado San Miguel quedaron completamente destruídos durante el incendio de ayer. 

Según los últimos datos proporcionados por esta fuente oficial, en el siniestro que se desarrolló en el interior del mercado de abasto salteño entre las 3.10 y las 9.30, las llamas consumieron la tercera parte de la infraestructura del histórico mercado capitalino. Al cierre de la jornada, el relevamiento ya había delimitado mejor el daño ocasionado por el foco ígneo, porque en las primeras horas de la jornada se informaba que se había quemado la mitad del predio.

Uno de los testigos presenciales del inicio del fuego fue el sereno José Ramón Flores. Contó a Salta/12 que durante la madrugada escuchó un fuerte estruendo que se asemejó a una explosión, precisó que el sonido provino del sector a su cargo, ubicado en la intersección de las calles Urquiza e Ituzaingó. Cuando llegó a ese lugar el fuego ya había comenzado. "Intenté apagarlo con un matafuegos, pero fue imposible", relató. "Después hubo una segunda explosión y ya no pude hacer nada. Llamé a la policía para informar lo que pasaba y que vinieran lo antes posible", lamentó. Según el comisario Gustavo Gerardi, la llamada de Flores ingresó a las 3.17 al sistema de emergencias 911. Los bomberos tardaron seis minutos en llegar.

Flores, junto a otros cuatro serenos, custodian todas las noches el interior del San Miguel, lugar actualmente señalizado dentro de la ciudad turística por su cercanía a la plaza principal de capital provincial. Según explicó Flores a este dario, escuchó la explosión en un descanso del grupo entre rondas programadas en las oficinas de la administración del Mercado, ubicadas en un primer piso de la estructura de hierro, cerca del patio de comidas y del Centro de Salud. "Por suerte, pudimos salir a tiempo", dijo, mientras con sus compañeros esperaba sobre la vereda de la calle Ituzaingó "las ordenes del jefe", el administrador del Mercado San Miguel, José Muratore.  

"Pepe" Muratore se quebró frente a las cámaras que transmitían en vivo. Relató las postales del interior del mercado que quedaban a la vista a medida que el humo se retiraba. "Es desolador", repitió. A causa del fuego, que a las 9 de la mañana no había sido totalmente extinguido, un número indeterminado pero alto de familias perdieron su fuente de trabajo y sustento. Puesteros y puesteras lloraban en las puertas de ingreso al Mercado mientras se enteraban de la magnitud de sus pérdidas.

"Estoy destruido. Me informaron a las 3 y media del incendio. El Mercado es mi vida", dijo Muratore. "Por calle Urquiza, entre el 30 y 50 por ciento de los puestos están completamente quemados. Por tres o cuatro días no vamos a abrir", anticipó después en la improvisada rueda de medios. "Ningún puestero va a volver hasta que no veamos cómo hacemos para trabajar todos", aclaró. Aludía a readecuación de comerciantes en sectores que sean habilitados por Bomberos, la Policía de Salta, y el municipio capitalino. Hasta ayer, los puestos de venta que no habían sido alcanzados por el fuego eran los situados en la feria del subsuelo con acceso por la calle Ituzaingó; los de venta de pescado fresco, pollos frescos, frutas y verduras frescas, frutas secas y patio de comidas, todos con acceso por la avenida San Martín, y los negocios de venta de regionales con ingreso por la Peatonal La Florida.

"Voy a hablar con el intendente (Emiliano Durand), con el gobernador (Gustavo Sáenz), a ver cómo nos pueden dar una mano, pero no para pedir subsidio", aclaró Muratore. "Los del Mercado no somos de pedir. Si nos dan un crédito para reconstruir, lo vamos a pagar", afirmó después. Acotó también que ayer entregó a Bomberos de la Policía el equipo DVR que guarda grabaciones de las 32 cámaras de seguridad del mercado para el peritaje. "Algo debe haber ahí seguramente que aporte datos precisos sobre cómo comenzó todo esto", indicó.

Las autoridades, después del fuego

El gobernador llegó por la mañana al sector del Mercado San Miguel más afectado por las llamas. "Quiero agradecer a Dios que no hay víctimas. Es una situación desoladora en la parte vieja del Mercado", manifestó, tras recordar su gestión como jefe comunal del municipio de Salta y el proceso de reforma que emprendió, particularmente en el recambio de la infraestructura eléctrica y las conexiones a gas de red en los patios de comidas. 

En ese momento de sus declaraciones, puesteros vociferaron su descontento ante la máxima autoridad de la provincia y en contra del administrador del Mercado. "Entiendo la situación, pero no voy a hablar en estas condiciones", amagó el mandatario. "Vamos a acompañarlos", afirmó luego en relación a los comerciantes afectados. 

"Me comuniqué con el intendente de la capital para brindar soluciones", añadió. Emiliano Durand no recorrió el sector destruido porque no se encuentra en la provincia. "Son momentos difíciles para los que están trabajando y para los que estamos gobernando", dijo Saénz ya en referencia a su relación con el gobierno de Javier Milei. "No creo que haya sido accidental, pero ya lo determinarán los peritos y la justicia", estimó sobre el origen del fuego. El Jefe de Gabinete del municipio capitalino, Juan Manuel Chalabe, confirmó en el lugar del siniestro que el gobierno provincial se había puesto a disposición para resolver "lo antes posible la situaciones más urgentes".

"Es lamentable que un edificio histórico tenga que atravesar por esta circunstancia, porque los daños fueron muy importantes", afirmó por su parte el ministro de Seguridad y Justicia, Marcelo Domínguez, que también recorrió el sector más afectado. El funcionario dijo que si bien la administración del Mercado San Miguel cuenta con un seguro por daño total, "el gobierno seguramente apoyará a los y las puesteras, como ya ocurrió tras el incendio de la Feria de calle Ituzaingó". Domínguez recordó así el rol del Estado salteño después del incendio que consumió casi toda la galería de la feria de pulgas en junio de 2022, antes del Día del Padre. Esta vez, el fuego del abasto salteño diezmó las futuras ventas navideñas, también las de fin de año, y provocó perjuicios directos a al menos a un tercio de los comerciantes que habitualmente trabajan en el Mercado San Miguel.

Puesteros y puesteras del Mercado ayer por la tarde, esperando para retirar mercadería perecedera. 

(Imagen: Analía Brizuela). 

Durante la sesión de ayer en el Concejo Deliberante de la ciudad de Salta, el tema central fue el incendio en el Mercado. Hubo reclamos cruzados por parte del concejal Martín Del Frari (Frente Salteño) hacia Elicea Evangelina Sarapura (Juntos por el Cambio), que preside actualmente la Comisión de Medio Ambiente, Higiene y Seguridad. "Aquí hay una Comisión de Medio Ambiente y su presidenta es parte de la oposición. Creo que tendría que estar a disposición de la gente que lo perdió todo", lanzó Del Frari. Previsamente se excusó: "cuando ocurren estas tragedias que nadie espera, no es momento de buscar culpables". "Los concejales oficialistas vamos a presentar un pedido de informes porque queremos saber qué pasó", anticipó. "Tenemos que ir al Mercado para preguntarle a esos puesteros cómo los ayudamos", arengó.

"Creo que sí es el momento de buscar culpables y de hacerse cargo, porque gracias a Dios no hay personas llorando la muerte de familiares", respondió Agustina Álvarez Eichele (JxC). "Tenemos cinco ordenanzas vigentes en relación al Mercado San Miguel", marcó. En ese sentido, puso especial énfasis en la ordenanza 15.151, de 2016, que detalla la composición del directorio del Mercado San Miguel e incluye a dos representantes designados por la municipalidad de la ciudad de Salta. "Nosotros, como parte de la muncipalidad, tenemos que analizar si realmente esas dos personas trabajan de manera eficiente para evitar este tipo de sucesos", lanzó.

El techo del Mercado. Vista desde la esquina de Ituzaingó y Urquiza (Imagen: Analía Brizuela)

La vicepresidenta segunda del Concejo se refirió también al rol del Estado como organismo de control. "Si hablamos de un Estado presente, hablamos de un Estado que tiene que controlar", afirmó en el recinto. "Varios bomberos aseguraban hoy (por ayer) que el Mercado San Miguel no cumplía con la normativa relacionada con la seguridad, la salubridad y la higiene. La realidad es que cuando los lugares no están preparados, las probabilidades de siniestros son aún más altas", razonó. 

Por la mañana, pero en el sector destruido por las llamas, el presidente del Concejo Deliberante, Darío Madile, aseguró ante la prensa que no era momento para evaluar si el Mercado de abasto de Salta debía continuar funcionando a tres cuadras de la plaza central de la capital de la provincia. "El San Miguel es una gran familia y uno ve la posibilidad de trabajo que le da a muchas familias", aseveró el concejal por el Frente Salteño. También realzó el rol del Estado ante siniestros inesperados que afectan a gran número de familias. "El Estado es el gran plan de contingencia", afirmó.