Para Víctor Hugo Morales, la noticia de Donald Trump presidente “ya fue”. En su editorial, el periodista y conductor de La Mañana puso la lupa sobre lo que pasó en Argentina durante las 24 horas en las que la agenda estuvo focalizada en Estados Unidos y repasó varios casos de violencia institucional, que refuerzan la idea de que “el infierno está encantador”.
El editorial de Víctor Hugo Morales
Ya está lo de Trump, ya fue. Porque a la misma hora que leíamos el mensaje de Milei y Bukele a Trump, a Gerardo Mirkin lo estrellaban contra el pavimento.
Nosotros estábamos con el asunto de Trump, y a esa hora "Jerry", un jubilado de los miércoles, era masacrado a patadas por la policía de Bullrich y estaba rumbo al hospital.
Pasó lo de Trump, mientras a la misma hora que él hablaba de la "edad de oro del mundo" Marco Antonio Centurión salía de la cárcel y recibía amenazas.
Pero era la persona equivocada. Bullrich se ufanaba de un error y lo escrachó de la forma bestial que tiene de hacerlo.
Allá Trump, y acá la Argentina, injusta y violenta, en la era tramposa de Milei y su banda. Todo es igual, nada es mejor. El infierno está encantador, en serio. Todo eso rojo de los republicanos son llamas que también nos queman.
Danza macabra de Pettovello con un paquetes de fideos, Villarruel con genocidas y Bullrich haciendo la publicidad de un talco.
Bausili, presidente del Banco Central, baila con Caputo, forrados con los dólares robados en los jardines de Macri. Y Rosatti con Magnetto condenan a Sabbatella por meterse con la mafia, y no dicen una palabra de Bausili.
De verdad que el infierno está encantador.
