Invertir en medidas para luchar contra el cambio climático tales como sistemas de alerta por olas de calor puede salvar 2 millones de vidas al año, y sus beneficios pueden cuadruplicar el dinero gastado en ellas, afirmó este jueves la Organización Mundial de la Salud (OMS) a pocos días de que comience la Cumbre del Cambio Climático en Bakú (COP29).
De cara a esa nueva cita en la lucha contra el calentamiento global, la OMS ha publicado dos informes en los que recomienda también el desarrollo de energías limpias para uso doméstico o "una eficiente política de precios de los combustibles fósiles" para poder lograr ese ahorro en vidas humanas.
"En Bakú llevaremos el mensaje de que la crisis climática también es una crisis de salud, algo que ya nos está afectando, y que combatir el calentamiento global puede por tanto generar enormes beneficios sanitarios", destacó a EFE la directora del Departamento de Medio Ambiente, Cambio Climático y Salud, María Neira.
La lucha medioambiental puede contribuir, por ejemplo, a reducir los siete millones de muertes relacionadas con la contaminación atmosférica, destacó Neira antes de presentar en rueda de prensa la posición de la OMS de cara a Bakú.
Por otro lado, "con políticas de transporte más sostenibles y menos contaminantes, que generaran menos accidentes y mejor vida sanitaria, reduciríamos también los 1,2 millones de muertes relacionadas", subrayó.
Sistemas de producción de alimentos más sostenibles, otro aspecto que puede beneficiar en la lucha medioambiental, puede no sólo reducir el desperdicio alimentario actual, que roza el 30 % del total generado, sino ayudar a reducir los cinco millones de muertes que tienen que ver con dietas poco saludables o por malnutrición, añadió.
Los informes han sido elaborados por la OMS junto a otro centenar de organizaciones y unos 300 expertos, por lo que, según destacó Neira, son "un llamamiento colectivo de la comunidad sanitaria" para impulsar mayor acción climática en la COP29.
La salud "puede ser la motivación que se necesita para elevar las ambiciones" en materia de reducción de emisiones, insistió la experta española de la OMS, agencia que en los nuevos informes hace un llamamiento enérgico por el fin de los subsidios a los combustibles fósiles tales como el petróleo, el carbón o el gas.
"Actualmente, el mundo sigue subsidiando de forma masiva el consumo de esas energías fósiles, con cantidades que rondan los 7 billones de dólares anuales, lo que equivale a unos 3.000 dólares por familia en el planeta", destacó en rueda de prensa para presentar los informes el experto de la OMS Diarmid Campbell-Lendrum.
"Invirtiendo esos recursos de forma más inteligente podríamos tener no sólo un planeta más sano sino también una población con mejor salud", señaló el experto de Cambio Climático y Salud de la agencia, recordando que el consumo de esas energías no renovables contribuye a mayores problemas pulmonares y cardíacos, entre otros.
La enviada especial de la OMS para Cambio Climático y Salud, Vanessa Kerry, agregó que "la salud es una de las caras del cambio climático y no podemos ignorarlo al ver las sequías en África, la malnutricción y las olas de calor que se han convertido en la norma o las recientes inundaciones en Valencia" (España).
"Esos eventos demandan que adoptemos acciones urgentes y diferentes a las actuales", señaló en la rueda de prensa la hija del político estadounidense John Kerry.