Los préstamos en pesos al sector privado registraron en octubre un aumento cercano a 4,2 billones de pesos, lo que equivale a un incremento real del 6,3 por ciento. Los datos se publicaron en el último informe monetario del Banco Central.
La tendencia positiva lleva siete meses consecutivos, acumulando un aumento del 66,8 por ciento desde el mínimo alcanzado en enero de 2024. Esta expansión de los préstamos se extendió a prácticamente todas las líneas de crédito, a excepción de los adelantos, que mostraron una leve retracción. El gobierno apuesta al regreso del crédito para intentar hacer reaccionar la economía real.
Dentro del segmento de préstamos al consumo, se destacó el crecimiento de los créditos personales e hipotecarios, que experimentaron una suba mensual en dos dígitos. Los créditos personales crecieron un 12,7 por ciento en términos reales con respecto a septiembre, alcanzando un aumento interanual del 54,5 por ciento.
Por su parte, los préstamos con garantía real, como los créditos hipotecarios y prendarios, también mostraron un sólido desempeño. Los hipotecarios, en particular, crecieron un 16,9 por ciento en términos reales en octubre, aunque todavía se encuentran un 26,4 por ciento por debajo del nivel registrado un año atrás. A su vez, los créditos prendarios, que permiten financiar la compra de vehículos, subieron un 7,2 por ciento real y ya superan en un 6 por ciento el nivel de octubre de 2023. Este tipo de financiamiento ha sido fundamental para revitalizar el mercado automotor, ofreciendo alternativas de acceso a vehículos a través de financiamiento en pesos.
En el ámbito de los préstamos comerciales, se observó un aumento del 3,8 por ciento real en términos mensuales, siendo impulsado principalmente por los créditos instrumentados a través de documentos, que crecieron un 6,1 por ciento en el mes. Esta expansión se observó tanto en grandes empresas como en pequeñas y medianas empresas (PyMEs), aunque la mayor parte del crecimiento fue impulsado por las grandes empresas, cuyo acceso al crédito aumentó un 6 por ciento en términos reales. En cambio, las PyMEs experimentaron un crecimiento más moderado del 1,5 por ciento real y todavía se encuentran un 17,4 por ciento por debajo del nivel de octubre de 2023.
A pesar de los avances en diversas líneas de crédito, los adelantos en cuenta corriente fueron la única línea de financiamiento que experimentó una leve caída, registrando una baja del 0,8 por ciento en términos reales respecto al mes anterior. Sin embargo, este tipo de financiamiento aún mantiene un incremento del 13,5 por ciento con respecto a un año atrás, reflejando una cierta estabilidad en la demanda de fondos para operaciones a corto plazo.
El crédito al consumo también continuó en alza durante octubre, con una mejora mensual del 8,3 por ciento en términos reales, lo que se traduce en un incremento interanual del 19,7 por ciento. En particular, las financiaciones a través de tarjetas de crédito mostraron un crecimiento mensual del 5,8 por ciento, alcanzando un nivel 5,6 por ciento superior al de un año atrás. Este avance evidencia una recuperación en el uso del crédito para el consumo diario, impulsado en parte por una mejora en la confianza del consumidor y una reducción en la tasa de inflación.