El gobierno municipal puso en funcionamiento el registro de aplicaciones para el uso del servicio de para taxis y remises en la ciudad, al que se inscribieron ocho empresas y hubo una notoria ausente: Uber, una de las más conocidas y utilizadas en el mundo. “Tenemos un sistema que se ha modernizado y que es cumplible para aquel que lo quiera cumplir, el que no quiere inscribir su aplicación es porque no quiere participar de un sistema legal y seguro”, sostuvo el intendente, Pablo Javkin, en obvia a alusión a la app que quedó en la “clandestinidad”. La nueva normativa toma una serie de “beneficios” que brinda Uber, de manera de hacer más atractivo para la aplicación su inserción en el registro del sistema de transporte rosarino y, a la vez, de acotar sus exigencias.

“No hay ningún impedimento –dijo Javkin sobre la decisión de Uber de no participar del sistema legal rosarino- y me remito al éxito de la cantidad de aplicaciones de todo tipo que se han inscripto para legalizarse a nuestro sistema”.

En total las aplicaciones inscriptas en el registro municipal fueron ocho: MoviTaxi, Viaja Rosario, Cabify (taxi), Zubo, She Taxis, Viaja Remise, Cabify (remise) y Pedí tu remis.

Cada una de ellas cumplimentó toda la documentación exigida por la normativa aprobada por el Concejo Municipal para la inscripción al registro. En ese marco, desde esta semana MoviTaxi, quien ya superó la instancia técnica y de programación, se encuentra enmarcada en la nueva normativa ofreciendo viajes compartidos y las distintas herramientas de modernización.

“A partir de acá los usuarios de taxis y remises de nuestra ciudad van a tener múltiples posibilidades de tener un despacho de viaje a partir del sistema de aplicaciones en forma legal, en forma segura”, sostuvo el jefe municipal, y agregó: “Y obviamente eso es a lo que apostamos: a fortalecer el sistema legal con las seguridades que es nuestra prioridad absoluta, la seguridad del pasajero a la hora de utilizar un servicio público como es el servicio de taxis o de remises”.

La presión que aplicaciones como Uber –originada en 2009 en San Francisco, Estados Unidos, y luego globalizada- generan en el mercado, no son jurídicas sino económicas: ofrecen tarifas más accesibles y, al menos en un inicio, comisiones atractivas para quienes se sumen como choferes “autónomos”, aunque nadie garantiza que ese negocio que hoy puede lucir atractivo, sean homologables a las canchas de paddle en los años 90.

De hecho, el valor de la tarifa de un viaje en Uber lo regula “el mercado”, por medio de la relación entre oferta y demanda. En horas pico es más cargo, cuando la demanda se reduce el precio también.

El secretario de Gobierno municipal, Sebastián Chale, había dicho a Rosario/12 que “Uber fija su propia tarifa y algunos dicen que hoy tiene una tarifa muy accesible, pero una vez que logró una posición dominante en el mercado, pone la tarifa que quiere”.

La nueva normativa municipal, que se presentó esta semana, busca competir con ese aspecto de Uber al incluir las “tarifas variables”. Según informó la Intendencia, se trata de la “implementación de tarifas variables en días y horarios específicos de acuerdo a la oferta y demanda; éstas no serán mayores ni menores a un 20% en relación al cuadro tarifario vigente y sólo aplicará para viajes contratados a través de plataformas digitales”.

Además, esta variación en la tarifa será conocida antes de subir a la unidad”, del mismo modo que con Uber. La comunicación aclara que “quienes tomen el servicio en la vía pública, continuarán abonando la tarifa estipulada por el odómetro”.

En procura de equiparar las “ventajas” de la aplicación nacida en Estados Unidos, la norma local estableció como formas de pago “la posibilidad de pagar con efectivo, billeteras virtuales, tarjeta de crédito y débito”.

Además, Uber también consiguió, al menos hasta antes del ingreso de las nuevas 8 aplicaciones al sistema, que los taxistas legales descargaran la aplicación para no perder viajes.

En su página web, la aplicación dice: “Te damos la bienvenida a Rosario, donde los taxistas locales pueden ocuparse de las solicitudes de UberX. Solicita un viaje con UberX en la app de Uber y, luego, dirígete a tu destino, posiblemente en un taxi”.

La regulación de las ocho nuevas aplicaciones legales, cinco para taxis y tres para remises, es un intento del municipio por mantener regulaciones sobre el sistema vinculadas, entre otros aspectos, a la seguridad del transporte público.

Al realizar la presentación en el Palacio de los Leones, Javkin explicó que “atrás de un vehículo habilitado legalmente hay un esquema de seguridad que brinda el Estado en la garantía de quién maneja ese coche, quién es el titular de ese coche, cuáles son los requisitos de seguridad del pasajero que ese coche tiene”.

Entonces, “si uno se sube a un coche que no está dentro de ese control, obviamente tiene fuera del control todos esos elementos de seguridad que hoy es lo más preciado que tenemos”, resaltó.

El mandatario local también advirtió que los datos que suministra el sistema digital, mediante el uso de aplicaciones, permitirá no sólo incorporar mejoras al servicio, sino controlar y sancionar a los infractores, que “voluntariamente” decidieron no participar del esquema legal.

“En función de esto, entiendo que a partir de esta etapa vamos a tener además mucha más información sobre el funcionamiento del sistema y ser más efectivos también no sólo en la comunicación a la sociedad de las ventajas de los sistemas que están regulados y autorizados por el municipio, sino también en el contralor de las violaciones que se hagan a este sistema por parte de quienes así no lo hacen, que es un debate que hoy se da a nivel global, y también se da en la ciudad de Rosario”, destacó Javkin.