Un fuerte temporal de lluvia y viento sorprendió este domingo a los vecinos de La Playosa, una pequeña localidad de Córdoba donde se registraron ráfagas superiores a los 130 kilómetros por hora que causaron destrozos en viviendas y fábricas, voladura de techos y caída de árboles y postes de luz, entre otros incidentes. 

Si bien en La Playosa, la zona más afectada por el temporal, no hubo muertos ni heridos, en los Los Zorros, una localidad a poco más de 20 kilómetros de distancia, dos niños resultaron heridos por la caída de una rama y debieron ser trasladados al hospital Pasteur de Villa María: uno de ellos sufrió un traumatismo de cráneo leve y estará en observación, mientras que el otro, de 12 años, tuvo un neumotórax, por lo que permanecerá en terapia intensiva.

Este domingo, el Servicio Meteorológico Nacional había emitido alerta amarilla por tormentas para Catamarca, Córdoba, La Rioja, San Luis, Santa Fe, Chubut, Neuquén y Río Negro y alerta amarilla por vientos fuertes para Buenos Aires, Chubut, Córdoba, La Pampa, La Rioja, Mendoza, Neuquén, Río Negro, San Luis, Santa Fe y Santiago del Estero.

Sin luz y sin clases

Según publicaron medios locales, este lunes casi toda la localidad de La Playosa -ubicada a 180 kilómetros de la capital provincial y compuesta por 2757 habitantes- se encuentra sin luz. Por la magnitud de los destrozos, también se decidió la suspensión de clases, mientras que las autoridades provinciales se trasladaron a la zona para evaluar si declaran "catástrofe ambiental" y decidir "de qué manera colaborar".

"En cuestión de minutos, el cielo se oscureció y el viento empezó a soplar muy, pero muy fuerte. Y arrasó con todo a su paso: árboles, postes, techos y hasta casas. No dejó nada", contó un vecino del lugar en diálogo ElDoce TV.

"Fue algo inesperado porque en cinco minutos pasamos de ráfagas de 55 kilómetros en la hora, a 130. Eso hizo estragos. Además cayeron 28 milímetros de lluvia en un lapso muy, pero muy corto", señaló, por su parte, el intendente de La Playosa, Franco Villar.

El temporal, detalló el jefe municipal a medios locales, "destrozó 15 viviendas con voladuras de techos, empresas completas al punto de no servir nada". Además, "la planta de reciclado quedó destruida, lo mismo techos de fábricas, incontables árboles caídos y postes de luz. Es tremendo lo que nos pasó", agregó. 

"Hay un depósito de la empresa Arcor que quedó destruido. Se le voló el techo entero. Ahí, trabajan muchos vecinos", lamentó. 

Según Villar, "es la primera vez" que el pueblo sufre una catástrofe ambiental de este tipo. En ese sentido, agradeció que ninguna persona tuvo que ser rescatada por personal del municipio: "Hubo como una especie de autoevacuación. Estábamos preparados porque nos habían alertado que podía haber tormentas severas, pero esto nos superó", admitió.