Estudiantes y docentes de la Universidad Nacional de Salta participaron ayer de la tercera marcha federal contra el desfinanciamiento del gobierno nacional y en defensa de la educación pública. 

La Asamblea Interclaustro de la UNSa convocó a la movilización que se realizó este lunes en la ciudad de Salta, y ocupó al menos dos cuadras y media. Se estima que participaron cinco mil personas.

La semana pasada, el grupo de estudiantes que se había autoconvocado en la toma del rectorado ante el veto a la ley de financiamiento universitario, decidió levantar esa medida y adherir a esta marcha federal.

"Esta marcha surge a nivel nacional y en distintos puntos del país se llevó a cabo en la Universidad Nacional de Salta, surge de la interclaustro, de la cual nuestro sindicato ADIUNSa formó parte. En la interclaustro están todos los sectores que conforman la comunidad universitaria, pero entendemos que tomó fuerza a partir de la toma del rectorado, que llevaron a cabo un grupo grande de estudiantes en contra del veto a la ley de financiamiento universitario", dijo a Salta/12 la secretaria adjunta de la Asociación de Docentes e Investigadores de la UNSa, Pamela Pérez.

(Imagen: gentileza Nicolás Pantaleón)

Pérez es profesora de matemáticas y docente de la facultad de Exactas, donde la mayoría de estudiantes no adhirió a la medida, pero tampoco lo hicieron el decano de esta y otras facultades ni el rector Daniel Hoyos.

"Entendíamos que la ley de financiamiento venía a subsanar el ajuste que viene llevando a cabo este gobierno del presidente Milei. Son politicas de ajuste a la clase trabajadora. Era necesario nuevamente hoy poner el cuerpo en las calles y llamar a la unidad de todos los sectores", sostuvo la docente. 

"Somos conscientes de que en la misma universidad hay internas, que el propio rectorado no ha convocado a marchar como sí ocurrió en otras oportunidades (...), autoridades de algunas facultades tampoco han convocado a marchar, cosa que en otra oportunidad sí ocurrió", cuestionó Pérez. Consideró que las autoridades no convocaron a la marcha porque tampoco lo hizo el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN).

La docente opinó que la toma fue "un espacio clave para poner de pie el conflicto, de lucha frente a la orientación de algunos sectores que le quieren poner freno a esta lucha justamente y quieren desactivar el conflicto y llegar a un acuerdo con el gobierno".

En la UNSa se vienen desarrollando clases públicas, jornadas culturales, paneles debates, también hubo marchas junto a jubilados. Según señalaron desde la asamblea, el gobierno nacional ha ajustado un 40% en lo que va del año y "eso se refleja en gran medida en los bajos salarios docentes y no docentes, que por el momento no han tenido una actualización para enfrentar a la inflación del 2024. El presupuesto universitario tiene un ajuste del 30% respecto al 2023". Pérez dijo que se trata de un "ajuste brutal" y "se prevé que para el próximo año sea mayor".

(Imagen: gentileza Nicolás Pantaleón)

"Siempre vamos a estar poniendo el cuerpo, a salir a las calles, a seguir reclamando. Nuestras reinvindicaciones son justas. la unidad de los estudiantes y trabajadores va a hacer que podamos vencer", manifestó la docente.

Pérez anunció que el 22 de este mes se va a hacer un festival "propuesto desde el frente gremial, como una actividad de visibilización. Lamentamos mucho no poder haber mejorado la situación, sino todo lo contrario. Sabemos que para el año va a ser más difícil pero estaremos en pie de lucha. Reclamamos lo que nos merecemos", sostuvo.

Según indicó, los y las docentes que recién inician con 10 horas semanales ganan menos de $200.000. Mientras que, quienes tienen 20 horas, cobran alrededor de $400.000. "Aproximadamente el 80% tenemos salarios por debajo de la línea de pobreza. Es un reclamo genuino, queremos que termine este ajuste a la clase trabajadora. Nos formamos en las universidades, formamos parte de la universidad, somos docentes. Es muy injusto que nuestra tarea y formación no sea reconocida", sostuvo.

ADIUNSa convocó este lunes a un paro docente, "para que los compañeros puedan asistir a la marcha". Pérez precisó que hubo un 60% de acatamiento en la mañana. Esta medida se tomó porque las facultades no llamaron a marchar y no decretaron asueto administrativo para que trabajadores y trabajadoras puedan asistir. En este contexto, "es toda una cuestión política. El docente continúa dando clase y los estudiantes que quieren participar no lo pueden hacer porque se computan las asistencias", explicó. 

"Si no logramos que los distintos claustros, autoridades, nos unamos, es muy difícil. Se hace más pesado, por lo menos para quienes venimos al frente de la lucha", dijo la docente.

Pérez es hija de una empleada doméstica y para ella, la oportunidad de acceder a la educación superior significó movilidad social. "Venimos de muy abajo y para mí formarme en la universidad pública, ser profesional y tener la posibilidad de trabajar en la universidad me da un gran orgullo, sé que para mi familia también es un orgullo", expresó. Aunque también dijo que "uno cree que en este camino puede mejorar su calidad de vida", pero esto está en duda "con estos salarios de miseria". 

Ante la situación de crisis y ajuste, contó que hay profesionales de la UNSa que "están pensando en irse del país", y consideró que a diferencia de otros años en que se hablaba de la fuga de profesionales y hasta se hacían entrevistas en aeropuertos, "ahora en este momento, muchos están tomando esa decisión en particular. Pero no se dice nada, en algun punto los medios van fortaleciendo cierta postura en determinado momento, ahora que la situación es más crítica, no es publicitado".