El 22 por ciento de los jubilados y apenas el 6 por ciento de los titulares de la Asignación Universal por Hijo (AUH) se beneficiaron de la devolución del IVA dispuesta por el Gobierno desde comienzos del año pasado. Además, el monto promedio devuelto de IVA se ubica en 154 pesos para los jubilados y en 68 pesos para los titulares de la AUH. La baja efectividad de la medida se explica por el reducido nivel de utilización de la tarjeta de débito en el consumo de estos segmentos de la población. Los datos fueron recopilados por el Instituto de Trabajo y Economía (ITE) de la Fundación Germán Abdala, que depende de la Asociación de Trabajadores del Estado y la Unión de Trabajadores de la Educación.
La devolución del IVA para jubilados y titulares de AUH es una de las pocas medidas del Gobierno de apoyo a los sectores de menores ingresos, junto a la incorporación de los monotributistas a la AUH. Ambas decisiones formaron parte del primer paquete de cambios tributarios, que incluyó la enorme transferencia de ingresos a los exportadores agropecuarios a través de la eliminación de las retenciones y/o baja, como en el caso de la soja, y la reducción de subsidios que derivó en los sucesivos tarifazos.
En julio de 2016 se implementó el programa de devolución de IVA para jubilados que cobran la mínima, pensionados y titulares de la AUH y Asignación Universal por Embarazo (AUE). La iniciativa, plasmada en la Ley N° 27.253, plantea el reintegro de parte de las compras realizadas con tarjetas de débito para los beneficiaros de esas prestaciones sociales. “A partir de la implementación de esta ley 8,4 millones de personas recibirán el beneficio”, promocionaba el Gobierno. El programa contempló una primera etapa hasta octubre de devolución de una suma fija y luego el reintegro del 15 por ciento de las compras y hasta 300 pesos mensuales, con una actualización dos veces por año en base a la marcha de la inflación.
Los números oficiales reflejan el bajo grado de impacto de la devolución del IVA. El informe del ITE advierte que de los cerca de 3 millones de jubilados que cobran el haber mínimo, poco más de 600 mil se beneficiaron de la devolución hasta mediados de 2017, un 22 por ciento. En el caso de los titulares de una pensión por fallecimiento y de beneficiarios de la AUH, la cobertura es más baja aun, del 6 por ciento en este primer año. La porción de los jubilados en el programa mejoró desde un 12 por ciento el año pasado, mientras que en el caso de la AUH quedó sin cambios.
El promedio de las operaciones de consumo de jubilados registradas en el programa es de 2012 pesos en julio pasado, el 32 por ciento del haber de 6395 pesos. Ese porcentaje es del 40 por ciento entre los beneficiarios de la AUH y del 23 por ciento para el grupo de pensionados. Estos números reflejan que incluso entre los que utilizan la tarjeta de débito, el peso de este medio de pago sobre las compras es bajo.
El ITE también calculó los montos percibidos como devolución. Entre los jubilados y pensionados, el dinero del IVA devuelto pasó de un promedio de 226 y 209 pesos en julio de 2016, a 156 y 154 pesos en julio de 2017. “El nivel de la devolución se redujo incluso en términos nominales”, subraya el informe. En el caso de la AUH, la devolución promedio pasó de 35 pesos en julio de 2016 a 68 pesos un año después, con un máximo de 72 pesos en marzo de 2017. Al tener en cuenta la inflación del período, la devolución del IVA se redujo en términos reales.
“Durante el primer año de su implementación parecen corroborarse los pronósticos de quienes cuestionaron la medida. Lo que se observa es una muy baja cobertura del programa de devolución del IVA, sobre todo entre los beneficiarios de la AUH y los titulares de pensión por fallecimiento. Solo en el caso de los jubilados se observa una tendencia al alza en la cobertura. Por otro lado, el grado de utilización de la tarjeta de débito como medio de pago se muestra limitada, llegando al 40 por ciento de los consumos en el mejor de los casos”, concluye el informe.