El Pasaje Pan habita la ciudad de manera preciosa, como una burbuja de oxígeno que vivifica a quien lo pasea. Y desde hace un tiempo, ha vuelto a ser lugar donde escuchar música, de manera íntima, gracias a Late Pasaje Pan, el ciclo que organizan Craz Librería y Rey Producciones, en donde ya se presentaron Shaman Herrera e Impresionante (Nico Sorín y Franco Fontanarrosa). Ahora toca el turno a Across The Universe, con Evelina Sanzo y Pablo Juárez; este sábado a las 20, Pasaje Pan (Córdoba 958) recibirá a la cantante y el pianista en formato dúo.
Volver a escuchar a Evelina Sanzo en tierra propia es para destacar, ya que será una ocasión tan especial para ella como para quienes la aprecian. Bahrein, Turquía e India, han sido los escenarios que la mantuvieron lejos de su ciudad, en una experiencia que ella adjetiva de modo preciso: “Dura”. “Anduve por países con culturas muy distintas a la nuestra, donde era difícil ser yo. Donde no existe ley de identidad de género, ni ley de matrimonio igualitario, ni ley de interrupción voluntaria del embarazo. Aprendí un montón, pero también extrañé muchísimo, demasiado”, explica a Rosario/12.
-¿Volvés a Rosario para quedarte o continuás viaje?
-Vine a estar un rato con la familia y les amigues, no sé por cuánto tiempo me quedo. Pero la idea es seguir viajando, está difícil estar en Argentina en este momento.
La vuelta al contacto con el público local se da en formato dúo, y esta decisión, si bien consecuente con la propuesta de Late, pareciera responder a la necesidad del afecto que anida por aquí, entre amistades, familia y artistas. Además, compartir escenario con el piano y talento de Pablo Juárez es una oportunidad diferencial para apreciar a ambos músicos: “Tocar con Pablo es vertiginoso. Nunca sabés con lo que te va a salir; estamos todo el tiempo escuchándonos, siguiéndonos; y nos vamos adaptando mutuamente, de acuerdo a lo que propone el otro. Me gusta mucho tocar en este formato, lo disfruto más que tocando con banda. Me permite otras dinámicas, otros tiempos y una cercanía con el público también muy necesaria. Pablo es un pianista con mucha personalidad, que no se queda quieto, que está siempre tocando, experimentando. Tocar juntes es muy nutritivo”.
Por su parte, Pablo Juárez está por estos días trabajando con sus varios “proyectos en formación: piano solo, dúo, cuarteto”, como comenta a Rosario/12. “Y con el trío nos estaremos presentando pronto, con un nuevo concierto en Centro Cultural Contraviento”. Así como Sanzo, el pianista también conoce experiencias internacionales, como lo señala la edición japonesa de uno de sus discos, premiado entre los mejores álbumes lanzados en Japón en 2018 por la revista especializada Latina Japón, distinción que lo llevó de gira en 2019 por las ciudades de Tokio, Yonago, Himeji, Osaka, Nagoya y Okayama. Ahora, la oportunidad de tocar con Evelina Sanzo le ofrece un matiz distintivo.
“Me gusta mucho hacer música a dúo, porque se genera una comunicación diferente a la de solo piano o en trío. Hay un diálogo constante, que se va entretejiendo, en donde las emociones y las palabras funcionan como disparadores creativos constantes. Evelina canta tremendo y se expresa de esa misma forma; el dúo tiene momentos oníricos, y a partir de allí entramos y salimos de diferentes estados energéticos”, señala el pianista.
-¿Cómo será el repertorio?, ¿hay varios estilos?
Evelina Sanzo: -¡Sí! ¡Hay de todo! Se cumplen 10 años de la salida de mi primer disco, Curandera, así que vamos a hacer algunos temas de ese disco. También hay tango, hay canciones de artistas muy nuevos, homenajes. Hacemos todo lo que tenemos ganas de hacer.
Pablo Juárez: -El repertorio viajará por canciones de diferentes épocas y estilos: jazz, rock, canción y tango, se pasean de la mano; desde Eladia Blázquez a Radiohead, de Irving Berlin a Charly García.
Que el ámbito que los reúna sea Pasaje Pan, es algo que Sanzo sabe sintetizar: “Estamos muy felices de tocar en un espacio tan hermoso e histórico de la ciudad como es el Pasaje Pan, un lugar que siempre propició el encuentro de artistas, muy íntimo y diverso. Siento que es como un nidito en medio del centro. Muy hermoso”.