El fiscal especial Jack Smith pidió a una corte federal detener la apelación que presentó contra la decisión de la jueza Aileen Cannon, quien había desestimado la acusación por mal manejo de documentos clasificados contra el expresidente y actual presidente electo, Donald Trump. El rumor de su posible renuncia, cerraría las causas federales que tiene bajo su órbita contra el magnate.

El equipo del fiscal había presentado una acusación contra el republicano por la retención ilegal de documentos confidenciales en Mar-a-Lago, su residencia en Palm Beach, sur de Florida, tras abandonar la Casa Blanca en 2021, así como por obstrucción. Trump se había declarado no culpable en este proceso, en el que también estaban acusados Waltine Nauta y Carlos de Oliveira, el asistente personal y el administrador de la propiedad de Trump en Mar-a-Lago, respectivamente.

Posible renuncia

El miércoles, medios estadounidenses informaron que Smith planea renunciar antes de la asunción de Trump el 20 de enero, junto con todo su equipo, que depende del fiscal general Merrick Garland.

Según el diario The Washington Post, la dimisión busca cerrar los casos federales abiertos contra el exmandatario, pero existe la posibilidad de que el Departamento de Justicia excluya a Trump de la apelación relacionada con los documentos clasificados y mantenga en el proceso solo a los coacusados Walt Nauta y Carlos De Oliveira. Esta medida permitiría continuar la apelación sin afectar directamente a Trump y respetando las políticas que impiden procesar a un presidente en funciones.

Smith estaría evaluando la posibilidad de presentar un informe final con sus hallazgos al fiscal general Merrick Garland, según fuentes cercanas al fiscal especial. Dicho informe serviría para documentar las investigaciones y los avances logrados antes de que Trump asuma la presidencia.

Asalto al capitolio

En cuanto a la causa por el asalto del Capitolio en 2021 durante la asunción de Joe Biden como presidente, la jueza Tanya Chutkan aprobó el viernes pasado una pausa en el juicio contra el magnate para dar a Smith el tiempo necesario para determinar los pasos a seguir tras la victoria de Trump en las elecciones presidenciales. La magistrada suspendió los plazos y estableció que el Gobierno deberá presentar su posición definitiva sobre el caso penal el 2 de diciembre, como había solicitado el fiscal.

Este 21 de noviembre, los abogados de Trump debían presentar su documentación ante la jueza, argumentando que, a la luz del fallo de la Corte Suprema sobre la inmunidad judicial de los expresidentes, el juicio en Washington no debería llevarse a cabo.

Causa en Nueva York

Además de los casos federales que están bajo la orbita de Smith, Trump enfrenta dos juicios penales paralelos en Nueva York y de Georgia. En el primero, acusado de comprar el silencio de la exactriz de cine porno Stormy Daniels, un juez retrasó hasta el 19 de noviembre su decisión sobre la petición de la defensa de desestimar el caso.

La defensa de Trump había solicitado antes de las elecciones al juez Juan Merchan que desestime el caso a la luz del fallo de la Corte Suprema que otorga a los expresidentes inmunidad por los actos oficiales. Tras la victoria del republicano en los comicios, la fiscalía necesita ahora más tiempo para evaluar los siguientes pasos ante una situación inédita.

El magistrado de origen colombiano había previsto anunciar el 26 de noviembre la sentencia que iba imponer al primer expresidente de Estados Unidos en sentarse en el banquillo, tras retrasarla en dos ocasiones. De momento, el futuro judicial del presidente electo en esta causa sigue en el aire.

Si Merchan desestima el caso, no habrá sentencia contra Trump, lo que sin duda sería una victoria para el magnate de 78 años. Si no lo hace, parece poco probable que lo condene a la cárcel ya que su equipo legal apelaría la decisión e interferiría con el papel de Trump como presidente cuando asuma el cargo en enero.

Causa en Georgia

En Georgia, Trump también enfrenta a la justicia por supuestas presiones electorales en 2020, incluida una llamada telefónica en la que pidió a un funcionario local que le encontrara 11.000 votos perdidos. Pero el avance de la acusación sufrió un duro revés cuando se reveló que la fiscal local, Fani Willis, mantenía una relación íntima con un investigador que había contratado, Nathan Wade.

A la petición de sobreseimiento del caso por parte de los abogados de Trump se sumaron las consecuencias de la sentencia favorable de la Corte Suprema en el mes de julio sobre la inmunidad presidencial. En esa línea, la apertura del juicio, prevista para el 5 de agosto, se aplazó sin fecha.