El vocero presidencial, Manuel Adorni, fue el encargado de anunciar la decisión de retirar la jubilación y pensión presidencial a Cristina Kirchner, tras la ratificación de la condena por la Causa Vialidad. El argumento fue que "representa lo contrario al honor, al mérito y al buen desempeño", conceptos que no están presentes en la Ley 24.018 como motivo para revocar el beneficio, y que tampoco el Gobierno anunció aplicar con otros ex jefes de Estado condenados -en segunda instancia- como Carlos Saúl Menem, a quien el presidente Javier Milei admira y homenajeó colocando su busto en la Casa Rosada.
Luego del anuncio de Adorni, el Ministerio de Capital Humano -que tiene bajo su órbita al ANSES- informó que daría un paso más y también iría contra la jubilación del ex vicepresidente Amado Boudou, a quien en diciembre de 2020, la Corte Suprema le confirmó la condena de 5 años y 10 meses por la causa de la ex imprenta Ciccone Calcográfica, sanción que cumple en prisión domiciliaria.
El caso de CFK es distinto. La condena por la causa Vialidad, más allá de las irregularidades marcadas por su defensa y la denuncia de lawfare en su contra, aún puede ser revertida o revisada por la Corte Suprema. Pero Adorni se adelantó al Poder Judicial y sostuvo que "la jubilación a ex mandatarios es un privilegio que no debería existir en la Argentina, más aún si quien la percibe está condenada".
El argumento oficial es contrario a lo que marca la Ley 24.018, que en su artículo 29 pone las condiciones de revocación de la jubilación: "Los beneficios de esta ley, no alcanzan a los beneficiarios de la misma que, previo juicio político, o en su caso, previo sumario, fueren removidos por mal desempeño de sus funciones".
La ex presidenta le respondió a la Casa Rosada a través de sus redes sociales: "Y Milei… dejate de dar órdenes ilegales a los funcionarios que acá no hay obediencia debida. ¡Asesorate! La pensión de los ex Presidentes no se les otorga por el buen desempeño, sino por el mérito de haber sido elegidos por el pueblo como Presidentes de la Nación. El mal desempeño de un presidente solo lo puede juzgar el Congreso de la Nación a través del proceso constitucional de Juicio Político, durante el ejercicio del mandato".
El propio Milei, que por el momento no se pronunció sobre la decisión, también está yendo en contra de sus propias palabras con la decisión anunciada este mediodía. En una entrevista hace un par de meses, un periodista le reclama que era "muy molesto" que CFK siga recibiendo su jubilación. Allí, el Presidente le respondió: "Es un derecho adquirido (...) Si yo vengo a respetar los derechos de propiedad, cómo voy a violentar los derechos adquiridos".
El jefe de Estado incluso prometió durante su discurso de asunción, de espaldas al Congreso, no realizar una gestión con eje en la persecución política. "En cuanto a la clase política argentina, quiero decirles que no venimos a perseguir a nadie, no venimos a saldar viejas vendettas ni a discutir espacios de poder. Nuestro proyecto no es un proyecto de pago de deudas, nuestro proyecto es un proyecto de país", dijo entonces.
"La tía Zulema"
"¿Qué parte no entendés Milei? Derecho Constitucional básico", respondió Cristina sobre el flojo argumento oficial para quitarle su jubilación como ex presidenta y la pensión como viuda del ex presidente Néstor Kirchner. Y también se encargó de marcar la contradicción ideológica que carga la decisión: "A las viudas de los ex mandatarios, la pensión se les otorga exactamente por eso: por ser viudas de señores ex Presidentes de la Nación. Sino, preguntale a la viuda de De la Rúa, que cobra la misma pensión y, como te imaginarás, no lo hace por el buen desempeño en el cargo de quien fuera su marido; que se tuvo que ir en helicóptero de la Casa Rosada dos años antes de terminar su mandato, después dejar un tendal de muertos -literal- en Plaza de Mayo".
Y le agregó: "Y si a ella no la podés contactar; preguntale a Martín Menem, tu Presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, por qué cobra la misma pensión la tía Zulema, viuda de Carlos Menem, que se fue del mundo con causas penales sobre contrabando de armas, sobresueldos de funcionarios y otras yerbas, y hasta condenas en segunda instancia".
El caso de Carlos Menem es paradigmático. El ex presidente es reivindicado por Milei, fue homenajeado con un busto en la Casa Rosada y su familia integra La Libertad Avanza y ocupa cargos centrales de decisión, como el caso del presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem o su primo Eduardo "Lule" Menem, subsecretario de Gestión Institucional.
"La tía Zulema" recibe la pensión del ex presidente que no fue condenado en un causa sino en dos, y estuvo involucrado en otros casos dramáticos para la historia del país como la causa AMIA; de la que fue absuelto, a pesar del pedido de condenado del Ministerio Público Fiscal. Menem fue condenado, con ratificación de la Cámara de Casación, en la causa "sobresueldos", donde el TOF 4 lo encontró culpable del delito de peculado y lo condenó a 4 años y medio de cárcel por el pago de coimas con fondos de la SIDE.
El expresidente, sobre el que Adorni no habló ni de honor ni de mérito, también fue condenado por la venta ilegal de armas a Ecuador y Croacia en la década del 90. La Sala I de la Cámara de Casación ordenó imponerle una pena de 7 años de prisión como coautor del delito de contrabando agravado por tratarse de material bélico, por contar la participación de funcionarios públicos y por haber sido cometido por más de tres personas. A pesar de esas condenas, Menem falleció como senador nacional.
La revisión de las jubilaciones y pensiones a presidentes y vicepresidentes anunciada por Adorni y ratificada por el Ministerio de Capital Humano debería seguir en su revisión de "honor, mérito y buen desempeño" o al considerar que "no deberían existir", también podrían solicitar un gesto del secretario de Deportes y Turismo, Daniel Scioli, quien cobra 2.148.585 de pesos por su jubilación de vicepresidente.
El aliado Mauricio Macri también recibe 5.083.872 de pesos y su "honor, mérito y buen desempeño" está puesto en tela de juicio en varias causas dormidas por el Poder Judicial: el blanqueo de capitales que benefició a sus familiares, la causa del Correo Argentino; la investigación por la adjudicación de parques eólicos; la renegociación de acuerdos por los peajes de la Ciudad de Buenos Aires.
En la previa de la segunda vuelta electoral, varias notas periodísticas habían atribuido a Macri la frase: "Si gana Massa me tengo que ir del país".
Según datos de la ANSES, otros ex jefe de Estado y vicepresidente que reciben su jubilación o pensión son María Estela Martínez de Perón ($2.844.554,80); Amalia Carmen Guido, hija mayor del expresidente José María Guido ($2.558.129,63); Julio Cobos ($3.222.807,78); Bety Nelly Andrés, viuda del presidente de facto Roberto Levingston ($6.315.522,82); Adolfo Rodríguez Saá, presidente interino por una semana ($4.900.464,54); Gabriela Michetti ($3.858.630,79) y Alberto Fernández ($6.737.586,32).