Dos proyectos recientemente ingresados al Senado de la Nación proponen mudar la capital, uno a Viedma emulando a Raúl Alfonsín y otro a Paraná, en Entre Ríos. En caso de avanzar, podrían generar un movimiento importante a nivel institucional, sobre todo en lo que respecta a la autonomía porteña, consagrada en la Constitución Nacional de 1994 y luego llevada más allá de lo que el texto preveía ya que la ciudad de Buenos Aires no tiene territorio propio.
“Si avanza el proyecto, claro que la provincia tendría que reclamar la Ciudad de Buenos Aires para que le sea devuelta, dado que se habría terminado la condición y el objeto por la que la cedió a la federación en 1888”, advierte Ciro Annichiaricco, abogado penalista, conocido por su participación como querellante en dos de los hechos de violencia policial más resonados, la Masacre de Budge ocurrida en 1987, y la Masacre de Wilde, que data de 1994.
Annichiaricco, docente de la Universidad Nacional de Lomas de Zamora (UNLZ) y exconjuez en los tribunales de esa localidad, es además autor de Buenos Aires para todos, libro publicado en 2022 por Ediciones Continente, en el que analiza distintos aspectos, tanto de la federalización de Buenos Aires como de la autonomización.
“La reforma constitucional de 1994, más allá de sus muchos aciertos, incorporó a mi juicio dos errores graves: el dominio originario de los recursos naturales existentes en sus territorios a las provincias, consagrado en el artículo 124, y la autonomía de la ciudad de Buenos Aires, consagrada en el artículo 129, con lo que creó un híbrido político y jurídico que generó y genera un mar de confusiones y contradicciones, que no se terminan de resolver”, explica el autor del libro.
“Y no se puede resolver porque es totalmente contradictorio con el sentido que en su momento tuvo la federalización de la ciudad de Buenos Aires, cuando la provincia cedió de su territorio para que se convierta en territorio federal", detalla.
Este punto, al que dedica parte importante del texto, es clave para Annichiaricco. Sostiene que, cuando el Presidente, en tanto autoridad federal, designaba al intendente, lo hacía en representación de todos los argentinos, en tanto autoridad nacional. Al trasladarse la decisión estrictamente a los porteños, se enajena de un derecho al resto de los argentinos.
“Lo correcto hubiese sido que se estableciese por ley electoral nacional un casillero más en las boletas de elecciones presidenciales, para que todo el pueblo de la Nación elija directamente a quien quiere como alcalde o intendente de la capital", reflexiona y dice que con ese cambio se le robó a los argentinos "el derecho de elegir al intendente de nuestra ciudad". "Insisto, que algo sea federal significa que es de todos los argentinos", dice mientras afirma que "ese punto viola el pacto de San José de Flores”.
En territorio prestado
El pacto de San José de Flores, firmado por la Confederación Argentina y la provincia de Buenos Aires en 1859, inmediatamente después de la batalla de Cepeda, permitió la reunificación nacional bajo el imperio de la Constitución Federal de 1853, que hasta entonces Buenos Aires había rechazado.
Una de las cláusulas centrales de ese pacto era la federalización del territorio de la ciudad de Buenos Aires, y con ella de la aduana y sus rentas, que hasta entonces no se coparticipaban. La federalización finalmente se hizo efectiva dos décadas más tarde, en 1880.
La ciudad de La Plata, cuya construcción comienza en 1884 y su fundación data de 1888, está íntimamente ligada a este hecho. El entonces gobernador, Dardo Rocha, decidió que, entregada la ciudad de Buenos Aires, la provincia debía darse una nueva capital.
Pero para Annichiaricco, los problemas que genera la autonomía no se agotan ahí, en la elección de gobernantes locales. Destaca, en primer lugar, que la Constitución Nacional facultaba a la recién creada Ciudad Autónoma para darse un estatuto, pero de ninguna manera una constitución, lo que finalmente ocurrió en el nacimiento de la ciudad independiente. Este punto es central a la hora de instalar la confusión sobre si se trata de un municipio, una provincia o qué estatus jurídico le corresponde. “Los municipios tienen simplemente una carta orgánica”, ejemplifica.
Agrega Annichiarricco: “La ciudad tiene más facultades que una provincia, otro disparate, ya que puede celebrar tratados con potencias extranjeras sin comunicación al Congreso Nacional, cosa que las provincias están obligadas a hacer. En todo territorio federal la única fuerza de seguridad interior es la Federal. Pues bien, en la Ciudad tendría que ser la Policía Federal, y resulta que inventaron una policía propia, de la Ciudad, como si fuese una provincia… sin serlo”.
“Hasta le inventaron otro poder judicial propio, con sus cámaras, hasta su Tribunal Superior o Suprema Corte, otro disparate, ya que ahora hay dos poderes judiciales con la misma competencia en el mismo territorio", considera el penalista que analiza como un problema como "se van pasando las competencias y va a llegar un momento en que el llamado Poder Judicial de la Nación va a quedar vacío, sin competencia, pero los jueces seguirán ahí tomando mate”.
A la hora de analizar la coyuntura actual, para Annichiaricco, "Argentina siempre fue un país unitario de hecho a partir de la misteriosa retirada de Justo José de Urquiza en la batalla de Pavón, cuando tenía todo a su favor". Se refiere a la batalla que tuvo lugar en 1861 en esa localidad del sur santafesino.
El Pacto de San José no había llegado a cerrar las heridas de la larga guerra civil y estas se reabrieron cuando Urquiza fue sucedido en la presidencia por Derqui. Los sucesivos actos de rebeldía de Bartolomé Mitre, entonces gobernador porteño y caudillo unitario, culminaron en esa batalla. Tras dos horas de fuego de artillería sostenido, las fuerzas federales al mando de Urquiza habian diezmado al enemigo.
Sin embargo, en vez de avanzar hacia la ciudad, Urquiza se replegó. Las causas de este movimiento nunca se aclararon y subsiste la tesis de un pacto secreto entre él, Mitre y Sarmiento. Según Annichiaricco, ése es el punto de inflexión que marca el dominio unitario, para el resto de ese siglo, y hasta nuestros días. La novela "Jauría", del escritor David Viñas, narra la huida de quien asesinó a Urquiza en su palacio, como venganza por aquel acto.
"Lo que ocurre hoy es que Javier Milei lleva ese modelo a un extremo, pero es la continuidad de algo preexistente", señala el abogado. Vuelve una y otra vez al conflicto entre las administraciones nacional y porteña, en tiempos de pandemia de Covid 19, entonces respectivamente en cabeza de Alberto Fernández y Horacio Rodríguez Larreta, por las restricciones sanitarias.
En ese entonces, Fernández ordenó el cierre de las escuelas y el dictado de clases en modalidad virtual, pero la administración porteña, en rebeldía, las abrió y judicializó la medida. El tema, que fue zanjado por la Corte Suprema a favor de la ciudad, dio una muestra del nivel de desbalance de poder realmente existente y del sobredimensionamiento de las instituciones porteñas.
Los proyectos
La senadora por Chubut Edith Terenzi, de origen radical y aliada del gobernador Ignacio Torres, propuso que se retome la Ley 23.512 de 1987. Allí se establecía el cambio de capital a Carmen de Patagones, también territorio bonaerense, y Viedma. “Queremos descongestionar el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y generar una nueva dinámica de desarrollo en el sur del país, una región históricamente relegada”, sostuvo.
El senador entrerriano Eduardo Kueider, electo por el peronismo pero muy cercano al oficialismo, sostuvo que “esta iniciativa busca promover el federalismo y desconcentrar la influencia política y económica de Buenos Aires. El traslado de la capital a Paraná no sólo implicaría un cambio de sede, sino también de paradigma. Sería una señal clara del compromiso con el federalismo y la búsqueda de un país donde todas las regiones tengan las mismas oportunidades de crecimiento y progreso”.
El proyecto de Kueider lleva el número de expediente 67/2024 y el de Terenzi 98/2024. Ambos fueron girados para su tratamiento a las comisiones de Asuntos Constitucionales, Asuntos Administrativos y Municipales y Presupuesto y Hacienda.