Nuestro suelo está poblado, como es evidente, por una gran cantidad de hombres y mujeres, niños y ancianos, y también por otras especies. Así, millones de personas conviven con diferentes animales de compañía, aunque muchos de ellos no tienen la suerte de tener un hogar: se estima que alrededor de 20 millones de perros y gatos viven en las calles, y enfrentan frío, hambre, peligros y privaciones.

En ese contexto, la Municipalidad de la ciudad de Salta informó recientemente que quienes adopten mascotas mayores de 10 años que están alojadas en el Centro “Matías Nicolás Mansilla” tendrán asegurada la cobertura veterinaria.

A través de esta iniciativa se espera que los perros que hoy están al cuidado de la comuna encuentren un hogar. “Los fieles amigos de cuatro patas se encuentran en óptimas condiciones, vacunados, desparasitados y castrados”, indicaron.

Para conocer más sobre este proyecto necesario y sensible, Pablo Díaz, director del Centro de Adopciones, aporta detalles.

-¿Cómo nace la idea de asegurar la cobertura veterinaria para quienes adopten animales de compañía en el municipio?

-La cobertura de atención veterinaria gratis de por vida es para aquellos perros de más de 10 años (viejitos o ancianos) que sean adoptados del Centro de Adopciones Nicolás Mancilla. El motivo surgió porque estos perros lamentablemente quedan en un segundo plano al momento de la adopción. Esto sucede, sobre todo, por los gastos económicos veterinarios que se requieren al adoptar un perro anciano.

-¿La iniciativa podría extenderse a futuro, a gatos y otras mascotas?

-La iniciativa actual está enfocada, por el momento, en estos animales ancianos, no descartamos que en el futuro pueda ampliarse a otros animalitos que también necesitan un hogar lleno de amor.

-¿Podría expandirse más allá del municipio y abarcar otros departamentos, implementarse en la provincia completa?

-La posibilidad de extender la medida a otros departamentos o incluso implementarla a nivel provincial, sería un paso muy positivo. Sin embargo, esto requiere un trabajo conjunto con otros municipios y el gobierno provincial, así como una planificación cuidadosa para garantizar los recursos necesarios.

-La campaña se lanzó hace pocos días ¿cuáles fueron las repercusiones hasta ahora?

-La campaña, aunque reciente, ha tenido una repercusión muy positiva. Muchas personas se han mostrado interesadas en la iniciativa, tanto en redes sociales como de manera presencial en el Centro de Adopciones “Matías Nicolás Mancilla”. Varios de nuestros perros ya tuvieron su segunda oportunidad. Hemos recibido muchas consultas sobre cómo adoptar perros mayores, y varias familias se han acercado para conocer más sobre los beneficios y el impacto de darles una nueva oportunidad a estos animales.

-¿Se plantea un seguimiento, tendiente a la adopción responsable para quienes se sumen a este programa?

-Sí, el programa incluye un seguimiento riguroso para garantizar la adopción responsable de los perros mayores. Los pasos son los siguientes: seguimientos periódicos, esto es, una vez adoptado, realizamos visitas al hogar cada 2, 3 meses, durante el primer año para corroborar que el perro está siendo cuidado correctamente. Esto incluye verificar su estado de salud y su adaptación al nuevo entorno. Luego, como se anunció, la asistencia veterinaria gratuita: las familias tienen acceso permanente a los servicios veterinarios del Centro para garantizar que el perro reciba atención adecuada durante toda su vida. Además, establecemos una comunicación constante: mantenemos contacto directo con los adoptantes para resolver dudas, ofrecer orientación y asegurarnos de que el animal esté feliz y bien atendido. Este seguimiento no solo busca proteger al perro, sino también apoyar a las familias adoptantes en este noble compromiso.

-¿Cuáles son las ventajas de incorporar un perro mayor al hogar?

-Adoptar un perro mayor trae numerosas ventajas tanto para la familia como para el animal: su carácter tranquilo, los perros mayores suelen ser más calmados y pacientes, ideales para hogares que buscan compañía sin la energía excesiva de un cachorro. También se destaca la obediencia y el aprendizaje porque muchos perros adultos ya han sido entrenados o tienen hábitos adquiridos, lo que facilita su integración al hogar. Por otra parte, la etapa destructiva está superada. Por lo general, los perros mayores ya no tienen la costumbre de morder muebles o desordenar jardines, lo que los hace más fáciles de manejar. Además, requieren una menor demanda de ejercicio. Es decir, no necesitan tanta actividad física, lo que los convierte en compañeros perfectos para personas mayores o con rutinas tranquilas. Y finalmente, su amor incondicional. Los perros mayores tienen un profundo agradecimiento hacia quienes les dan una segunda oportunidad. Su vínculo con sus adoptantes suele ser muy especial.

-¿Cómo describiría a los canes que esperan ser adoptados?

-Cada uno de los perros que esperan ser adoptados en el Centro de Adopciones "Matías Nicolás Mancilla" tiene una historia única y una gran capacidad de dar amor. Muchos de ellos han pasado por momentos difíciles, pero conservan una ternura y nobleza que conmueven. Hay perros mayores que buscan un hogar tranquilo para pasar sus últimos años rodeados de cariño.

-Si los 30 peludos disponibles hallaran familia, ¿la medida se extenderá a otros refugios?

-El objetivo es inspirar a más personas y municipios para que adopten medidas similares, asegurando el bienestar de los animales y promoviendo una cultura de adopción responsable en toda la provincia.

-¿Esta campaña es temporal o se prologará en el tiempo?

-La campaña no tiene un límite temporal estricto. Nuestra intención es que se mantenga y se fortalezca con el tiempo, dependiendo de los resultados y la aceptación de la comunidad. Queremos que este proyecto sea un punto de partida para generar conciencia sobre la importancia de brindar una segunda oportunidad a los perros mayores.

-¿Qué te impulsó a formarte en veterinaria?

-Mi vocación por el bienestar animal. Afortunadamente me ha llevado a liderar múltiples iniciativas en favor de la adopción responsable, la concientización sobre la tenencia de mascotas y el control poblacional mediante castraciones gratuitas. Intento combinar mi experiencia profesional con un compromiso social, organizando charlas educativas, jornadas de vacunación y campañas para evitar el abandono y el maltrato animal.

-¿Cuáles son los requisitos para ser adoptante?

-Los postulantes deben acercarse al centro con fotocopia del DNI , fotocopia de una boleta de servicio y firmar un acta de compromiso, que nos permite hacer el seguimiento del animal, y mediante la cual el propietario se compromete a brindarle una tenencia responsable del animal.

-¿Cuál es el impacto de este proyecto a nivel social?

-Las ventajas y el impacto del proyectos son múltiples. Por un lado, para las personas, adoptar un perro mayor ofrece compañía, tranquilidad y una conexión única. Estos animales suelen ser agradecidos, pacientes y adaptables, enriqueciendo la vida emocional de quienes los integran a sus familias. Por otra parte, a los animales les da una oportunidad de vivir sus años restantes en un hogar lleno de amor, cuidados y con dignidad, en lugar de pasar sus días en un centro de adopción. Y finalmente, en la sociedad, promueve valores como la responsabilidad, la empatía y el respeto hacia los animales, contribuyendo a una comunidad más consciente y solidaria.

-Entonces este tipo de gestos y políticas promueven la empatía…

-Sin dudas. Desde el Centro de Adopciones Nicolás Mancilla queremos destacar que cada paso que damos está orientado a construir una sociedad más empática y comprometida con los animales. Nuestra labor no sería posible sin el apoyo de la comunidad, los voluntarios, los adoptantes y las instituciones que creen en nuestra misión. Invitamos a todos a sumarse a esta causa, ya sea adoptando, difundiendo o colaborando con nuestras actividades. Cada gesto cuenta para transformar la vida de los animales y, en consecuencia, enriquecer la nuestra como sociedad. ¡Sigamos construyendo juntos un futuro donde ningún animal quede olvidado!