"Quienes integramos la Orquesta Sinfónica Provincial de Rosario, nos preguntamos: Las autoridades del gobierno de la provincia de Santa Fe: ¿podrán contratar a nuestro Director Titular, hoy desprovisto de vinculación legal con el organismo y sin percibir ningún tipo de remuneración desde hace meses? ¿Cumplirá el gobierno con el pago de lo adeudado a nuestros compañeros utileros, que además vienen trabajando en negro, desde hace años? ¿Cuándo garantizará la provincia una contratación formal para ellos, los utileros, dado que desempeñan tareas indispensables para el correcto funcionamiento de la orquesta? ¿Nuestros compañeros del área administrativa, sin los cuales no podríamos estar hoy aquí, cuándo dejarán de estar precarizados? Estimado público, no quisiéramos extendernos demasiado, pero la coyuntura nos apremia, y nos obliga a comunicar, también, que el sueldo de la gran mayoría de los integrantes de nuestra querida Orquesta está por debajo de la línea de pobreza. ¿Un salario así, permite afrontar el costo de un alquiler, los gastos de transporte o las necesidades de un hogar, de manera digna? No. ¿Alcanza para el mantenimiento de los instrumentos musicales que cada uno aporta? No. "Los aumentos salariales se tratan en paritarias entre gobierno y gremios", es lo que nos dicen...Pero entonces, ¿deberíamos, por esa razón, dejar de reclamar un derecho laboral, que es justo y que nos corresponde? A poco de terminar el año, seguimos transitando el abismo de las preguntas sin respuestas. Perduran las injusticias y nos agobia la situación de aquellos compañeros que trabajan sin percibir un salario, y la imposibilidad de llegar dignamente a fin de mes. Hoy tenemos una única certeza: ¡así no podemos seguir! Frente a este panorama, nuestra Orquesta se declara en estado de alerta, tal como lo ha hecho la semana pasada nuestra Orquesta hermana, la Sinfónica Provincial de Santa Fe. Hoy la partitura está en el escritorio de nuestros gobernantes. Mientras tanto, nosotros intentaremos darle vida a las obras de compositores tan magníficos como Tchaickovsky y Rachmaninoff, aquí, en este bellísimo Teatro… o allí, en la calle, cuando sea necesario…Las políticas públicas están en riesgo, y por ello los invitamos a que nos sigan acompañando, sosteniendo las expresiones del arte y las culturas, para la construcción de un mundo más solidario y más sensible. Muchas gracias".