La francesa Giséle Pelicot se presentó este martes a declarar por última vez ante el Tribunal de lo Criminal de Aviñón en el marco del mega juicio que inició contra su ex marido, Dominique Pelicot, y otros 50 hombres por los abusos que sufrió durante más de una década. Cara a cara con sus violadores, la víctima afirmó que "la cicatriz" que le provocaron "no se cerrará nunca".
Desde que comenzaron las audiencias en septiembre pasado, toda Francia y gran parte del mundo sigue el caso de Gisèle, quien fue violada durante años por distintos hombres, incluido su exmarido, que la drogaba para poder abusar de ella en estado de inconsciencia.
En este marco, durante la última jornada de declaraciones públicas a las que se presentará en este juicio, apuntó sin pudor y con mucho coraje hacia los acusados: "Siento rabia hacia estos hombres, porque en ningún momento pararon, en ningún momento denunciaron. Vinieron a satisfacer sus pulsiones sexuales. Podían parar en todo momento y ni uno solo denunció. Eso llama la atención".
"He perdido diez años de mi vida que nunca recuperaré", subrayó la víctima, que recordó que ahora tiene 72. Asimismo, Gisèle denunció que desde que empezó el procedimiento judicial, tuvo que escuchar "cosas inaceptables".
Sin embargo, la mujer resaltó que cuando tomó conciencia de la situación, eligió que el juicio se realizara a puertas abiertas, para que nadie se quedara sin conocer los hechos atroces que sufrió y los rostros de los criminales que los cometieron, a pesar de que "sabía" a los horrores a los que se "expondría".
Pelicot es sin dudas una de las mujeres más valientes de la época, ya que en numerosas ocasiones destacó que decidió que las audiencias judiciales sean públicas para que "la vergüenza cambiara de bando".
En tanto, este martes insistió en que esperaba que a raíz de este juicio, "la sociedad, machista, abra los ojos y cambie su mirada sobre la violación".
Al respecto de Dominique, su ex marido, indicó que era un hombre con una profunda frustración sexual, y criticó que como ella no aceptaba participar en propuestas de "intercambios de pareja" optó por drogarla para "hacer" con ella "lo que quería".
Cómo sigue el juicio
El juicio está en su recta final. Tras la última declaración de hoy de Gisèle y Dominique Pelicot, está previsto que este miércoles comiencen los alegatos de los abogados de los acusados, mientras que la semana próxima la Fiscalía solicitará las penas para los acusados antes de la intervención de los abogados de éstos.
Los hechos que se juzgan ocurrieron en la casa a la que los Pelicot se habían mudado al jubilarse en la localidad francesa de Mazan, cerca de Aviñón.
Dominique Pelicot entraba en contacto con otros hombres en un sitio online dedicado a encuentros sexuales y los invitaba a su casa con la promesa de permitirles violar a su esposa. Esto lo conseguía una vez que había administrado a su mujer grandes dosis de ansiolíticos, que la dejaban completamente adormecida e inconsciente, lo que les permitía a los invitados abusar de ella sin que guardara ningún recuerdo.
Al mismo tiempo, Pelicot grababa y tomaba fotografías de esas violaciones, documentos que se convirtieron en los principales elementos de prueba de la acusación.