El diario de mayor circulación en Francia, Ouest-France, suspendió el martes sus publicaciones en X, después de que otros medios europeos tomaran una decisión similar por considerar que la red social del multimillonario estadounidense Elon Musk difundía "desinformación" o fomentaba la violencia discursiva.
El medio explicó en un comunicado que no consideraba "sensato ni apropiado seguir activo (en X, ex Twitter) mientras no se tomen garantías serias frente a la desinformación, el acoso y la violencia". La acusación apunta a la desrregulación que el magnate de origen sudafricano viene llevando en la plataforma desde que la adquirió.
La semana pasada fue el diario barcelonés La Vanguardia el que tomó la iniciativa, siguiendo los pasos del británico The Guardian. Ambos sitios de noticias explicaron que dejaban de usar la plataforma como canal de difusión, y señalaron que solo la utilizarían para "el seguimiento de personas, entidades, empresas e instituciones".
Un acontecimiento que motivó a estos medios de comunicación a abandonar la red social X fue la reciente campaña electoral en Estados Unidos --en las que el Elon Musk, dueño de X, apoyó explícitamente a Donald Trump--.
El sudafricano y también dueño de Tesla respaldó al ganador de las elecciones y utilizó su cuenta personal, que cuenta con casi 205 millones de seguidores, para pedir el voto a su favor. En retorno, el republicano lo nombró para encabezar el recién creado departamento de "eficiencia gubernamental", una especie de Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado como el que comanda Federico Sturzenegger en este país.
"La decisión coincide con el anuncio del por parte de Donald Trump de nombrar a Elon Musk y un ex candidato republicano, Vivek Ramaswamy, para dirigir un nuevo Departamento de Eficiencia del Gobierno (DOGE), con el objetivo de hacer recortes en la administración estadounidense", consignó el medio español.
Musk compró X, antes Twitter, por 44.000 millones de dólares en 2022. Tras su desembarco en la plataforma, inició un "despido masivo de trabajadores" de la planta. Estos despidos incluyeron "la supresión del departamento que moderaba los contenidos", puntualizó La Vanguardia.
Los argumentos de Ouest-France
El 27 de octubre de 2023, en señal de protesta contra la falta de moderación y regulación de la red social X (antes Twitter), donde abundan la desinformación y las noticias falsas, Ouest-France desconectó sus publicaciones en la plataforma. Esta “huelga” fue lanzada por un colectivo para denunciar sus abusos. Desde entonces, nuestras distintas cuentas estuvieron solo marginalmente pobladas: la cuenta general pasó de 200 tweets diarios a alrededor de veinte tweets por semana.
En un año, está claro que nada ha mejorado: las nuevas medidas adoptadas por la red, bajo la dirección de Elon Musk, la debilitan aún más. Tras la vaguedad mantenida en torno a las verificaciones de cuenta en azul (antiguas certificaciones que indicaban la fiabilidad de una fuente, que se han convertido en simples insignias para los usuarios de pago), la red modificó las condiciones de bloqueo, perjudicando así la seguridad de los usuarios y ofreciendo un importante vacío frente al ciberacoso.
No es probable que el nombramiento de Elon Musk, opuesto a cualquier forma de regulación en la administración de Donald Trump simplifique la ecuación.
Ouest-France reafirma sus valores frente a las “redes antisociales”. Por estos motivos, y para defender los valores de nuestros medios, apegados a la democracia, la calma del debate y el respeto a todos, hemos decidido suspender las publicaciones en X, antiguo Twitter.
"En el estado actual de las cosas, no parece ni sensato ni adecuado alimentar esta red, mientras no se desplieguen garantías serias frente a la desinformación, el acoso y la violencia", aseguraorn.
De hecho, las reglas del juego ahora están sesgadas: los medios que se niegan a aceptar ofertas pagas ven su visibilidad reducida a un mínimo, mientras que los autores de publicaciones cuestionables solo tienen que pagar para encontrar una audiencia más amplia, analizaron desde el medio francés.
"¿Cómo pudimos transformar herramientas de debate, que podrían ser tan útiles para la democracia, en máquinas infernales que ignoran las normas de derecho y ética? ¿Por qué esta impunidad?", se pregunta presidente del medio, François-Xavier, y añade: "¿Cómo podemos aceptar que Internet sea una zona sin ley?".
"Hoy, X ha dado la espalda a los medios de comunicación, y no ofrece las condiciones necesarias para el ejercicio pacífico del periodismo, como también han señalado el diario británico The Guardian y el español La Vanguardia".
"Una observación amarga e irónica, sabiendo que las redes sociales se construyeron principalmente a partir del intercambio de contenidos desarrollados por terceros. A través de las tensiones que persisten y de la falta de vigilancia ante los excesos, X también contribuye al envenenamiento del debate público, que, sin embargo, es vital para la democracia. Esta situación, que deploramos desde hace más de un año, nos ha llevado a suspender la presencia de nuestros medios de comunicación en esta red", argumentó.