La periodista y conductora Cynthia García celebró el acuerdo contra el hambre que propuso el presidente de Brasil, Lula Da Silva, en el G20 y se mostró escéptica en el cumplimiento de las metas propuestas en el documento por parte del Gobierno de Javier Milei, aun con la firma regañadientes del mandatario ultraderechista.
Para la conductora de La García, del G20 “no se puede esperar mucho”, pero lo que es “interesante” es que Lula Da Silva sea el anfitrión del encuentro internacional y la “tracción de su planteo contra el hambre”, una “urgencia” que “siempre atendió”.
En este sentido, recordó la génesis del liderazgo del presidente de Brasil, allá en la época en que se conformaba la Patria Grande con Hugo Chávez, Evo Morales o Néstor Kirchner.
“Para tener soberanía y no ser colonia, necesitamos ser región. Esa es la configuración por la que Lula es Lula todavía en Brasil. Por todo lo que hizo en Brasil durante su gobierno en la configuración de la Patria Grande y como se plantó como líder regional, aún soportado la persecución y hoy es el anfitrión del G20”, sostuvo en la 750.
No obstante, la “constante” en el discurso de Lula es la importancia del rol del estado para los más necesitados, lo que va “a contramano de la política económica y social del Gobierno de Javier Milei”.
“La primera medida de Lula como presidente fue revertir el presupuesto de Brasil y volcarlo hacia quienes más lo necesitan y combatir el hambre. En este G20 que lo tiene como anfitrión, hay una tracción de un acuerdo global contra el hambre”, insistió.
"Milei se opone a la decisión política de dar de comer"
“¿Qué política contra el hambre va a fortalecer Milei? Tal vez la firma del acuerdo abre un portal diferente -como si fuera un multiverso- y el Gobierno de Javier Milei cumple con las metas que exige ese acuerdo o queda solamente en la firma”, se preguntó Cynthia García.
“Pocas expectativas generan, ya que el propio presidente se presenta como un topo que viene a destruir lo protectorio del Estado”, sentenció.
“Si esa es la columna vertebral de lo que piensa Milei del Estado y su Gobierno, bastante difícil es que implemente las políticas que propone una tracción contra el hambre como la que plantea el presidente de Brasil”, lamentó.
“Dar de comer es una decisión política e implica discutir la riqueza, discusión que viene sobrevolando estos encuentros internacionales que, si para algo sirven, es para establecer posturas geopolíticas que se transformen en líneas de financiamiento para políticas públicas. No estamos hablando ya de participación en las ganancias de los trabajadores, ni de mejor distribución, estamos hablando de dar comer, que la gente no tenga hambre, que la Argentina vuelva -como estuvo hasta el 2015- en una ecuación donde el hambre no es una constante, no es una preocupación generalizada”, señaló.
“Dar de comer es una decisión política, algo que está reafirmando el presidente de Brasil. A eso se opone Milei. Ojalá se respete la firma de lo que implica el acuerdo. Los países que admira Milei, los que dice que son del Primer Mundo, son los que hoy están discutiendo poner un impuesto a la riqueza para poder generar mejores condiciones de alimentación a escala global”, cerró.