En la Ciudad de Buenos Aires y en varias localidades de la Provincia comenzó a circular una nueva modalidad de estafa relacionada con las multas de tránsito falsas. Al parecer, los delincuentes colocan en los autos de manera discreta unos papeles que simulan ser infracciones, pero que, al escanear el código QR que incluyen, pueden comprometer la seguridad del teléfono móvil de la víctima y robar información personal, incluyendo datos bancarios.