Entre Litto Nebbia y el cine existe una relación cercana, y su visita a la ciudad, con jornada doble, compartirá este gusto cinéfilo. Hoy y mañana, en el horario de las 21, Contraviento Centro Cultural (Rodríguez 721) será el ámbito ideal para Música de Películas (viernes) y Canciones de Todos los Tiempos (sábado). En Música de Películas, Nebbia compartirá su álbum Cuadernos del cine francés de los ’60 y conversará sobre sus afinidades con el Cine Noir; y Canciones de Todos los Tiempos ofrecerá un repertorio entrelazado por anécdotas personales.

Por otra parte, la presencia del músico significa de manera especial, luego del desafortunado accidente que lo obligara a suspender sus giras: “Llevo un año y dos meses, pero estoy en plena recuperación de estas dos fracturas que tuve, de rótula en la pierna y de húmero en el brazo. Todavía falta, no puedo doblar bien la pierna, pero gracias a Dios no tengo ningún dolor. Camino despacito y con cuidado, y esto posibilitó que hace poco más de un mes haya comenzado a salir a tocar. Así que estoy contento”, comenta Litto Nebbia a Rosario/12.

-Recuerdo una anécdota sobre una película a la que ibas a ver muchas veces, creo que en el Cine Monumental, porque allí había una canción de un grupo que te gustaba. ¿Puede ser? ¿Qué película era?

-Exactamente. Era Vamos al twist (Hey, Let’s Twist!, 1961) con Joey Dee & The Starliters. Lógicamente, tengo el disco y hace un tiempo logré conseguir la película en DVD. La base rítmica de ese grupo era increíble, con dos negros que eran unos músicos excelentes; el organista hacía los bajos con los pies, en su pedalera; Joey Dee era el que cantaba y tocaba saxo. Un dato curioso, antes de ser reconocido internacionalmente, Jimi Hendrix pasó por esta banda.

-Cuadernos del cine francés de los ’60 es una nota de cariño a aquellas películas. ¿En qué cines las veías, cómo te influyeron?

-Todo ese cine francés lo veías aquí, en Buenos Aires, en los cines de la “letra ele”, como se los llamaba: el legendario Lorraine, el Losuar y el Lorca. Esos films tenían una puesta fotográfica nueva, con mucho espacio, a partir del concepto de esa época del gran fotógrafo Cartier-Bresson, y del director de fotografía Raoul Coutard. Luego estaba la temática de estas películas, muchas de ellas homenajeaban al thriller norteamericano, con actuaciones muy cool. Toda una novedad para la época; muchos de esos films de Jean-Luc Godard, François Truffaut y Alain Resnais, dejaron una marca en la historia del cine.

-Me parece que la atmósfera del cine negro debe ser atractiva para todo músico, ¿es así?

-Voy a charlar un poco al respecto, y también voy a mostrar cuatro clips que realizamos con mi amigo Ricardo Murad, un excelente fotógrafo, loco por esto. Lo que hicimos fue visualizar la música que he escrito en homenaje a algunos de estos films; vale decir, no les puse música, porque ya la tienen y es hermosa, de grandes maestros como Michel Legrand o Georges Delerue; entonces, escribí algunas músicas evocando los films, y luego trabajamos en visualizarlos. Pero estará lleno de canciones, porque voy a cantar además una gran cantidad de canciones mías, que han sido incluidas en films, como "Solo se trata de vivir" o "Viento, dile a la lluvia".

-¿Te gusta componer para cine?

-Me encanta escribir bandas sonoras, es una tarea altamente creativa y un desafío, porque estás sonorizando situaciones o actuaciones que no fueron creadas por vos.

-¿Y cómo fue el proceso de trabajo de Cuadernos del cine francés de los ’60, siendo además un disco instrumental?

-Tenía que ser instrumental sí o sí, es un disco de música para el cine y por el cine. Mi mujer, Alex (Alexandra De Luca), pintó el cuadro de portada, que ilustra un poco el barrio Montmartre. Lo grabé solo, en casa, a partir del piano y sintetizadores, luego agregando los arreglos y contrapuntos que hice para otros instrumentos; y en algunos temas también toqué bajo eléctrico.

Sobre el repertorio previsto para Canciones de Todos los Tiempos, Nebbia adelanta que “será una suerte de songbook, con muchos clásicos de siempre y también muchos temas divinos, de esos que quedan perdidos en cada disco, porque no se los divulga”. Por otro lado, la inactividad momentánea en los escenarios no impidió a Nebbia su tarea sostenida y ejemplar frente al sello Melopea: “Estamos publicando más material de mis archivos inéditos en vivo. El año pasado salió el box set Los Archivos de Nebbia, con 12 CD’s, y ahora está saliendo el volumen anexo de los archivos, con 6 CD’s más. Me gusta rescatar estas grabaciones, porque hay mucho de improvisación, cambios rítmicos, canciones inéditas, y demás detalles que usualmente no están en un disco grabado en estudio. También estamos publicando el álbum Melopea, por su 50 aniversario, que incluye un CD más, con el álbum completo y en su orden de compaginación, interpretado por otros artistas sensibles a la cosa; gente como Los Reyes del Falsete, Pez, Emilio del Guercio, Jerónimo Verdún, Los Mersey Mustards, y muchos más. En Europa me acaban de publicar un vinilo doble, con material de mis canciones 1971-1988, los publica el sello Vampisoul, que el año pasado también publicó Bazar de los milagros, de 1976. Es un reconocimiento a mi obra y es lo que les interesa descubrir. En buena hora”.