El fantasma de las costas brasileras acecha a los balnearios de la Costa Atlántica argentina. Con precios locales altos, en pesos pero dolarizados de hecho y en muchos casos exorbitantes, las redes sociales se llenaron en las últimas semanas de posteos con comparaciones de tarifas de alojamientos en la costa que llegan a estar por encima de hospedajes internacionales del mismo tipo, incluso en capitales europeas. En el medio, el sector turístico interno empieza a mostrar su preocupación por las dificultades para competir con esos destinos, los altos costos derivados de la inflación acumulada y la licuación del poder adquisitivo de la clases medias y bajas.