La ministra de las Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual bonaerense, Estela Díaz, cuestionó la posición del Gobierno de Javier Milei en relación a las políticas de género, en el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, que se conmemora el 25 de noviembre.
Por la 750, la funcionaria bonaerense remarcó que esta es una fecha de lucha. “Habrá movilizaciones en las principales ciudades del país, acciones políticas e institucionales, pero también será un día de reclamo”, sostuvo.
“Es la primera vez que nos encontramos con un Gobierno nacional que niega la existencia de la violencia de género, siendo el único país del mundo que en la ONU no votó la resolución de compromiso para reducir la violencia contra mujeres y niñas. Lo votó el mundo entero, menos Argentina”, afirmó.
Y esto se traduce en políticas concretas: “Acaban de presentar un presupuesto donde es nulo cualquier aporte económico para abordar las violencias de género. El rescate a las víctimas de trata se redujo en un 88%”.
“El Centro de Economía Política (CEPA) presentó un informe muy detallado: no tienen ni presupuesto ni responsables al frente de los programas. Algo que no ha pasado en Argentina, ni siquiera con los cambios de Gobierno en los últimos 30 años”, se lamentó Díaz.
El impacto en las políticas hace que miles de mujeres estén en una situación de mayor vulnerabilidad: “Cuando hablamos de violencia de género hablamos de que entre mayo de 2023 y junio de 2024 se recibieron más de 240 mil denuncias en la provincia de Buenos Aires, con distintos grados de violencia en cada caso”.
“Estamos hablando de una problemática de enormes dimensiones que las provincias estamos abordando. En nuestro caso, estamos fortaleciendo la línea 144, coordinando el fortalecimiento de los equipos, porque ahora no van a ser atendidas”, afirmó.
Esto, sostuvo, se hace con fondos de la Provincia y en medio del recorte del Gobierno nacional: “Estamos buscando garantizar la atención, porque salva vidas. Todo esto está resuelto y asistido por la propia provincia. Y como en tantas otras cosas, el Gobierno nacional se desentiende de políticas sobre las que tiene responsabilidad”, señaló Díaz.
“En el mundo no pueden creer la posición de Argentina. Los objetivos de desarrollo 2030 fueron firmados por todos los países de las Naciones Unidas. Argentina está quedando en un extremismo antiderechos que el resto de las naciones del mundo no puede entender. Ni siquiera los aliados de Milei son tan extremos en estos posicionamientos”, finalizó.