Hace hoy ocho años Fidel partía en un nuevo viaje. Nos dejaba pero ya había alistado sus pertrechos para acompañarnos para siempre, für ewig, como gustaba decir a Gramsci. El futuro seguirá teniendo al Comandante como protagonista por su ejemplaridad como líder revolucionario y antiimperialista, como dirigente popular, por su inquebrantable fe en el socialismo como el camino, el único camino, que conduce