El Comité Nacional de la UCR denunció que detrás del “nuevo ataque” contra la sede de esa fuerza política estaría el servicio de inteligencia del gobierno de Javier Milei. A través de un durísimo comunicado, el partido puntualizó que las dos agresiones que sufrió ese edificio no se trataron de delitos comunes y lo relacionaron con “la dinámica política” actual teñida de “violencia” contra opositores.
El nuevo hecho al que se refirió el comité presidido por el senador Martín Lousteau ocurrió el sábado pasado, cuando dos personas robaron los fusibles del tablero eléctrico instalado en la sede del edificio.
El primer hecho había ocurrido el 2 de noviembre último, cuando durante la madrugada ingresaron varias personas y provocaron varios destrozos. Por el hecho, investigado por el fiscal Federico Tropea, hubo detenidos a los que se le secuestraron elementos inusuales para ladrones comunes: un handy, micrófonos, ocho teléfonos, un inhibidor de frecuencias y una placa de la Policía Federal, entre otros.
La declaración del partido radical cuestionó que, en su momento, este hecho se difundió y se lo informó al gobierno nacional, pero “el presidente Javier Milei habló ridícula e irresponsablemente de un ‘autoatentado’”.
¿Vínculo con la SIDE?
Pero la gravedad de la nueva denuncia por el nuevo ataque a la sede partidaria no sólo reside en la revelación propiamente dicha de ese hecho sino en que, según dejó traslucir el partido a través de un comunicado, los ataques tendrían un “sugestivo” vínculo con un “tenso” encuentro entre legisladores nacionales con miembros de la Secretaría de Inteligencia de Estado (SIDE).
En esa reunión, Lousteau, en su carácter de presidente Comisión Bicameral de Seguimiento de los Organismos de Inteligencia, había cuestionado severamente los lineamientos del Plan de Inteligencia Nacional diseñado por el gobierno de La Libertad Avanza (LLA). Las críticas se basaron en los antecedentes de acciones de inteligencia desatada sobre dirigentes, periodistas, organizaciones y figuras públicas que cuestionan las políticas del gobierno nacional.
El comunicado de la UCR indica que Lousteau consideró “preocupantes” varios puntos del plan elaborado por la SIDE y exigió “más información sobre los mismos”. Esto “generó tensión en el encuentro”, recalcó el escrito. “En su momento decidimos mantenerlo en reserva, pero ante esta nueva agresión hacemos público ese episodio.”
“Ni aquel ni este son delitos comunes como los que lamentablemente padecemos a diario los argentinos y argentinas. Se trata de la sede de un partido político nacional y los ataques no tuvieron ningún fin económico”, aclararon.
Cómo fueron los ataques
En el primer episodio, siempre según el comunicado, “quienes ingresaron hicieron destrozos pero no robaron ni las computadoras. En el más reciente, la vandalización de los fusibles conlleva riesgos de vida y ningún beneficio pecuniario”.
“Además de las agraviantes palabras del presidente, que en su momento elegimos no responder, hubo escasa y nula comunicación y colaboración de parte de las autoridades nacionales”, criticó el texto.
Luego del que ocurrió el sábado último, las autoridades partidarias informaron que la sede del comité ubicado en Alsina 1786, a pocos metros del Congreso de la Nación, fue blanco de “un nuevo ataque” concretado por dos personas que “robaron los fusibles” del tablero de luz instalado sobre la vereda y cortaron la luz en el lugar.
Precisaron que el hecho ocurrió a la 1:41 de la madrugada del sábado 23 y detallaron que esas dos personas bajaron de “un automóvil modelo nuevo de la marca Citroen” que estacionó a unos metros de allí.
“Bajan dos personas jóvenes que primero recorren la zona, uno de ellos saca un teléfono y aparenta enviar un mensaje de audio mientras el otro se sienta frente al tablero eléctrico del edificio. Luego lo fuerzan y dejan sin luz al edificio”, dice el comunicado del partido que relata lo que filmaron las cámaras de seguridad.
“Vamos a estar parados siempre en contra de la violencia"
“Repudiamos este nuevo ataque contra la casa de todos los radicales y como demócratas nos preocupa la dinámica política a la que estamos asistiendo como sociedad”, señaló el comunicado de la UCR.
Y advirtió: “Vamos a estar parados siempre en contra de la violencia y sosteniendo la Constitución Nacional frente a aquellos que atenten contra la convivencia interna en nuestra querida Argentina”.
"Quieren sembrar miedo"
En este sentido, el secretario general de la Convención nacional de la UCR, Hernán Rossi, señaló que "la ciudadanía tiene que estar al tanto de lo que nosotros pensamos que puede ocurrir".
"Acá hay algo que es muy claro, que es lo que más nos preocupa: que en los dos hechos no hubo un intento de robo, sino que existió claramente demostrar que no se quería robar sino que podían manejarse con total impunidad. Cuando se trata de un ataque a la sede de un partido político de la oposición -los partidos políticos son puntales del sistema democrático-, creemos que es de suma gravedad. Y también creemos que esto se desescala si desde las más altas esferas del Estado, llámese Presidente de la República, se repudia este hecho, cosa que hasta el momento no ha ocurrido. La vez anterior (Milei) sugirió que había sido un autoatentado", adivirtió.
"Tenemos la preocupación de que acá haya detrás algunos sectores que pueden ser de los servicios de inteligencia tratando de generar algún tipo de intimidación a la oposición y, si no fuera así, una consecuencia de una apelación permanente al odio, a plantear la política en la lógica de amigo-enemigo", agregó.
"Quieren sembrar miedo y de eso tenemos que salir rápido, por eso llamamos a la reflexión a las autoridades nacionales", cerró.