El presidente Javier Milei anunció que prohibirá el traslado de presos por cuestiones de género, luego de que se diera a conocer que el líder de la banda Los Monos, Guillermo Cantero, había presentado 10 hábeas corpus en los que decía autopercibirse mujer.
"Sólo en un país cuyos valores han sido trastocados puede darse semejante barbaridad. Vamos a prohibirlo, los delincuentes no van a poder solicitar un cambio de penal bajo el paraguas de la ley de igualdad de género", aseveró Milei al encabezar la ceremonia de Entrega de Sables por la tarde en la Casa Rosada.
Discursos ultras sin sustento
El mandatario señaló que los establecimientos penitenciarios que no adhieran a la medida, "lo único que estarán haciendo es premiar la creatividad de los criminales y faltarle el respeto a las víctimas del delito".
También manifestó que hay casos donde los convictos argumentan autopercibirse del género femenino para "aprovecharse de las reclusas o para continuar con sus negociados desde condiciones más laxas".
El jefe de Estado sostuvo también que uno de los pilares de su administración en materia de seguridad es que "los buenos son los de azul", en referencia a los policías, y "los malos son los delincuentes".
"El Estado tiene que proteger a las víctimas y castigar a los victimarios, no proteger a los victimarios y castigar a las víctimas", sostuvo. Y agregó que "durante muchos años se intentó dar vuelta a la lente con la que observamos la realidad. En medio de esta puja argumentativa ridícula, nuestras Fuerzas de Seguridad quedaron desamparadas por un Estado que se cansó de ningunearlas", remarcó el Presiente.
Un cristal que ve todo al revés
Según Milei, "era tal el ninguneo que hasta se llegó al absurdo de liberar presos o castigar a policías honorables por el imperdonable delito de hacer bien su trabajo. Maquillaron un abolicionismo sin escrúpulos bajo el nombre de garantismo, pero lo único que garantizaban era la perpetuidad del crimen y el vale todo". También dijo que se logró erradicar "completamente los piquetes de nuestra sociedad, cosa que hace un año parecía imposible, y lo logramos, al primer mes de haber asumido". Y sostuvo que el Gobierno está "poniendo a trabajar a presos de todo el país con el objetivo de que devuelvan el daño que le causaron a la sociedad" y para que "comprendan realmente el esfuerzo que arrebatan en cada delito que cometen... les sacamos los celulares, en todas las cárceles nacionales: se acabó el ´Viva la Pepa´ de que sigan haciendo sus negocios desde las cárceles federales".
Milei se refirió a Guillermo Cantero, condenado a 113 años de prisión. Según el presidente la estrategia del jefe narco rosarino busca que se le permita “recibir visitas de hombres”. Dijo que su gobierno viene a “a girar el timón 180 grados, el monopolio de la fuerza y la represión del delito es una responsabilidad pública e indelegable”. Señaló que los “tres pilares fundamentales” en su gestión serán: “El que las hace las paga, el delito hay que castigarlo en todo momento y lugar. Dentro de la ley todo, fuera de la ley nada”.
Entre sus alusiones grandilocuentes, frente a los uniformados se dijo convencido de que “la misión de este Gobierno es establecer bases que sean duraderas para restablecer la grandeza de nuestra Nación, en seguridad y en los demás órdenes de la vida también. Porque entendemos que llegará el día en el que nosotros no seamos gobierno y le tocará a otros continuar con nuestro legado. Las Fuerzas de Seguridad tendrán que sostener los pilares que reivindican el rol social de las fuerzas del orden. Ustedes serán los verdaderos protagonistas de este cambio de paradigma”. Para cerrar su demagogia de mano dura dijo que hay dos “verdades inmutables”: “La seguridad pública es indispensable para el crecimiento de nuestro país, y son las leyes las que separan a los hombres de las bestias, y están para ser cumplidas”.
El acto de entrega de sables y despachos a las Fuerzas Armadas se realizó en el Salón Blanco de la Casa Rosada y participaron la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, para quien el mandatario pidió un aplauso; la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, y el vocero Manuel Adorni.