En medio de una ola de ataques y amenazas en su contra, la escritora y autora de Cometierra, Dolores Reyes, pidió “parar los mecanismos de odio” y “no dejar que se naturalicen” estos niveles de violencia. Durante una entrevista con Víctor Hugo Morales en la 750 mientras crece la escalada de violencia y se agudiza la campaña del Gobierno en contra de su novela, valoró la solidaridad de sus colegas y le respondió a la vicepresidenta, Victoria Villarruel, y otros dirigentes de La Libertad Avanza que afirmaron que el libro "sexualiza" a los niños.


Los ataques a Dolores Reyes no son nuevos, sino que forman parte de una constante de los últimos tiempos, que cada tanto se reaviva. Sin embargo, en las últimas semanas la ultraderecha argentina se ensañó con Cometierra, la novela que cuenta la historia de una niña huérfana que puede ver dónde están las personas desaparecidas tras descubrir que, tiempo atrás, su propia madre había sido asesinada por su padre.

Desde la vicepresidenta, Victoria Villarruel, hacia abajo no han parado de multiplicarse los discursos contra el libro que sostienen que “sexualiza a las infancias” por tener dos escenas con contenido explícito, sin importar que el texto va recomendado recién para alumnos de entre 17 y 18 años. 

Esta semana se sumó el diputado libertario José Luis Espert, quien en tren de sus ataques al gobernador bonaerense, Axel Kicillof, volvió a repudiar el libro y condenó que sea distribuido en escuelas de la provincia de Buenos Aires, donde integra la lista de títulos que llegan a las bibliotecas escolares. 

“Más o menos hace un mes vengo recibiendo una catarata de insultos y amenazas. Estos últimos días bajó bastante, porque empezó a haber respuesta de toda la comunidad de escritores”, contó Reyes. "Escritores solidarizándose con esta situación que es anormal y asimétrica, desde equipos de trolls y la vicepresidenta contra una ciudadana”, apuntó la autora, que lamentó el acoso que recibió en la red social X (antes Twitter).

“El problema —sostuvo Reyes— es que ellos lanzan campañas de odio que repercuten en otra persona, que pasa a la acción: lo vimos con este hombre que quemó a cuatro lesbianas en Barracas”. En este contexto, no descartó ir a la Justicia para denunciar todas las amenazas que recibió: “Todavía no hice denuncias, pero lo estoy pensando. Sí guardé pruebas. Bloqueé a un montón de gente, pero guardé links, capturas de pantallas, material”.