El atraso cambiario forzado por el Gobierno de Javier Milei para mantener la desaceleración inflacionaria no sólo está generando un impacto negativo en la balanza comercial en un Banco Central sin reservas, sino que también empezó a dañar a la economía local. Importantes fuentes del supermercadismo adelantaron a Página I12 que los comercios de frontera ya perdieron hasta el 30 por ciento de su facturación p