A 5,8 kilómetros de la Municipalidad de Carmen de Patagones, el distrito más austral de la provincia de Buenos Aires, se ubica la Casa de Gobierno de Río Negro, en la ciudad de Viedma. En ese edificio, ubicado a solo unas cuadras de río homónimo y límite natural entre las jurisdicciones, se encontraron a solas los gobernadores Axel Kicillof y Alberto Weretilneck.
El gobernador bonaerense arribó al despacho de su par patagónico tras una extensa recorrida por las localidades de Patagones, Villalonga y Stroeder, donde llevó adelante una agenda de gestión que involucró a ocho ministros de su gabinete.
Kicillof acudió hasta Viedma acompañado por la jefa de Asesores, Cristina Álvarez Rodriguez; la ministra de Hábitat, Silvina Batakis; y los titulares de Infraestructura, Gabriel Katopodis; de Salud, Nicolás Kreplak; y de Transporte, Jorge D'Onofrio, aunque el encuentro se realizó a solas entre los mandatarios provinciales.
"Durante el encuentro, ambos mandatarios conversaron acerca de la situación que atraviesan sus provincias en el actual contexto nacional", informaron desde la Casa de Gobierno bonaerense. A ello agregaron que ambos "exploraron líneas de cooperación y trabajo conjunto".
Por su parte, el gobernador sureño añadió que la conversación giró en torno a "la realidad política, social y económica de nuestras provincias y del país", al tiempo que analizaron "los desafíos que se vienen".
Desde la Casa de Gobierno rionegrina se agregó, además, que ambos "compartieron detalles" de los proyectos previstos para el año que viene, "priorizando el impulso de iniciativas estratégicas que fomenten el desarrollo integral y la posibilidad de profundizar el trabajo mancomunado, considerando los lazos cotidianos y sociales que unen a ambas provincias".
Kicillof y Weretilneck, un encuentro de peso tras el escándalo por la planta de GNL
El encuentro entre ambos mandatarios llega luego de la disputa por la instalación de la planta de gas natural licuado (GNL) que los tuvo como protagonistas.
Es que la empresa malaya Petronas, en sociedad con YPF, pretendía realizar la inversión y el puerto de la localidad bonaerense de Bahía Blanca parecía el lugar indicado. El Gobierno nacional señaló que para eso la provincia de Buenos Aires debía adherir al Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI), algo que Kicillof echó por tierra.
En medio de las disputas argumentativas, YPF anunció que la planta de GNL se instalaría en Río Negro, donde aún debían realizarse importantes obras de infraestructura para poder lograrlo.
"El acuerdo con Petronas de 50 mil millones de dólares, que veníamos trabajando hace diez años, no era para traer uno o dos barcos, cosa que ya ocurre en Bahía Blanca. La gran inversión era construir una planta en tierra, que con trabajo argentino e inversión en territorio nacional posibilitaría el crecimiento. Esperamos que el papelón de Milei no espante a los inversores", había reclamado Kicillof desde La Plata a fines de septiembre.
En esa misma línea, el mandatario había asegurado que la posibilidad de que se escape la inversión "nos entristece y estamos asustados y devastados por el hecho de que, por un mal manejo, se pierda la posibilidad de una planta en tierra para el procesamiento de GNL".
"Esperamos que el Gobierno nacional ponga sus empeños no en hacerse los cancheros en la televisión, sino en que la inversión se haga, porque estaba lista pero ahora corre el riesgo de frustrase por culpa del presidente Milei", pidió en aquella oportunidad.
Otra cruz en el mapa federal: los viajes de Kicillof por las provincias
Como señaló Buenos Aires/12, Axel Kicillof llevó adelante este año una estrategia de relacionamiento con otros gobernadores, donde la defensa del federalismo frente a la retirada del Estado nacional que encabeza Javier Milei fue el punto de encuentro entre todos, pese a las diferencias políticas. Claro que, a la vez, contribuye a la proyección de la imagen nacional del bonaerense.
Entre esos viajes más allá de las fronteras bonaerenses se encuentran los dos encuentros con el santafesino Maximiliano Pullaro, dirigente de la Unión Cívica Radical (UCR) a quien en marzo le facilitó 80 patrulleros en comodato hasta que la provincia vecina finalmente recibiera de las terminales automotrices los que había comprado.
Previamente, el bonaerense se había encontrado en Chubut con el gobernador Ignacio Torres, uno de los tres mandatarios del PRO, con quien firmó convenios de cooperación en materia de salud.
Kicillof también tuvo su paro por Santa Rosa, La Pampa. Allí, además de firmar diversos convenios, junto a Sergio Ziliotto recorrió el Parque Industrial y visitaron APEX, una proveedora de bienes intermedios a la industria petrolera, que emplea a 100 trabajadores y cuyas operaciones, aseguraron, entraron en riesgo a partir de la aprobación del Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones (RIGI).
El último viaje interprovincial del mandatario bonaerense ocurrió en agosto, cuando estuvo en La Rioja para acompañar a su par Ricardo Quintela durante la jura de la nueva Constitución provincial.
Allí, ambos mandatarios suscribieron también un convenio marco de cooperación para promover el trabajo conjunto en materia de salud, seguridad, trabajo y políticas de género y diversidad sexual, entre otras.
El mensaje de Kicillof a Milei desde la "Patagonia bonaerense"
Como se marcó, la previa del encuentro entre los gobernadores estuvo signada por una abultada agenda que el Gobierno provincial encaró en Carmen de Patagones. Allí se inauguró un edificio escolar, se hizo entrega de computadoras a estudiantes secundarios, al tiempo que se distribuyeron escrituras gratuitas, se puso en funcionamiento una ambulancia y se anunciaron nuevas obras de infraestructura.
“Frente al abandono del Estado nacional y el ataque permanente a la educación pública, en la provincia de Buenos Aires seguimos construyendo escuelas y llevamos a cada municipio las herramientas que los pibes y las pibas necesitan para seguir estudiando”, expresó Kicillof y agregó: “De esto se trata la libertad, de ampliar derechos, facilitar el acceso a la educación y generar igualdad de oportunidades para todos y todas”.
Sobre el cierre, pidió “hacer el esfuerzo de recorrer los barrios, comprender las problemáticas y tener bien claras cuáles son las prioridades: ante el ajuste de este modelo de especulación financiera, nosotros reafirmamos que podemos conversar con todos los sectores, pero que primero está el pueblo de la provincia de Buenos Aires”.
“En la provincia de Buenos Aires no les vamos a soltar la mano a quienes más nos necesitan: aunque nos quiten los recursos que nos corresponden, continuaremos con la obra pública y los programas que amplían el acceso a la salud, la educación y el trabajo en los 135 municipios”, concluyó.