Los principales medios de prensa de Honduras y un sondeo a boca de urna conocido al cierre de esta edición daban al actual presidente del país y aspirante a la reelección, Juan Orlando Hernández, como el triunfador en los comicios celebrados ayer. Sin embargo, el ex mandatario Manuel Zelaya proclamó al candidato de la Alianza de Oposición, Salvador Nasralla, como ganador en base a sus propias encuestas. “Puedo afirmar que el presidente de Honduras es Salvador Nasralla, ganamos las elecciones a nivel nacional”, afirmó Zelaya en una rueda de prensa acompañado de líderes del Partido Libertad y Refundación (Libre), que integra la Alianza de Oposición contra la Dictadura. Los hondureños esperaban el primer informe del órgano electoral.  

Según datos recopilados por dos radios de alcance nacional, Hernández se ubicaba poco después del cierre de los comicios como el vencedor de los comicios. En distritos electorales como los departamentos de Cortés y Olancho, norte y oriente del país, el mandatario es el candidato más votado, según el recuento, en base a sondeos propios, de varios medios de comunicación. Sin embargo, en la ciudad de Choluteca, sur del país, se prevé un resultado más reñido entre Hernández y Salvador Nasralla. En tercer lugar aparece el aspirante del ultraconservador Partido Liberal, Luis Zelaya.

La empresa Ingeniería Gerencial, que ofreció sus resultados en la radio HRN de Tegucigalpa, dio a Hernández un 43 % de los votos de una muestra de 800.000 votantes, por encima de sus Nasralla y Zelaya. La Alianza de Oposición anunció por su parte que presentará un informe con sus propios sondeos preliminares. 

La aspiración de Hernández, quien ganó los comicios de 2013 bajo la bandera del Partido Nacional, es rechazada por la oposición con el argumento de que la Constitución hondureña no permite la reelección presidencial, aunque un fallo del poder judicial de 2015 dejó abierta esa posibilidad. 

El historiador y sociólogo Marvin Barahona, del Equipo de Reflexión, Investigación y Comunicación (ERIC), advirtió que la posible reelección de Hernández podría despertar un clima de confrontación en el país. “La candidatura de Juan Orlando Hernández no solo es polémica. Tiene una alta dosis de ilegalidad, lo que conlleva a que los resultados pueden ser ocasiones para mayores confrontaciones, sobre todo si los mismos favorecen al oficialismo, por ser calificados por diversos sectores como fraudulentos”, opinó Barahona.

Las votaciones cerraron oficialmente a las 17:00 hora local (20 de Argentina), una hora después de lo previsto debido a la presencia de votantes en fila en colegios electorales. Unos 6,1 millones de hondureños estaban habilitados para votar en estos comicios, donde además de presidente elegían a tres vicepresidentes de la República, 128 diputados al Parlamento, 20 al Centroamericano y 298 corporaciones municipales.