La relación de Javier Milei con el mundo industrial reconoce estas hipótesis:
- No conoce cómo funciona su entramado productivo y laboral.
- Ignora los componentes básicos que lo hacen estratégico en el desarrollo económico y en la innovación tecnológica.
- Tiene rechazo a empresarios y trabajadores del sector por dogmatismo ideológico.
- Está convencido de los estereotipos colgados sobre industriales, alimentados durante décadas por el discurso económico conservador.