Racing logró en Rosario la victoria que necesitaba para meterse de verdad en la pelea por el campeonato. Sin tres de los campeones de la Copa Sudamericana (Quintero, Zuculini y Salas) derrotó 2 a 0 a Central con goles de Luciano Vietto y Adrián "Maravilla" Martínez en el segundo tiempo, se colocó a solo dos puntos del puntero Vélez (45 a 43) e igualó la línea de Huracán. La Academia jugará el miércoles en Avellaneda ante Estudiantes, el partido pendiente de la 24º fecha y en función de los resultados que consigan Vélez y Huracán podría trepar a lo más alto de la tabla a dos jornadas del final.

Los dos manejaron la pelota en el primer tiempo con bastante prolijidad. Pero les faltaron recursos en las áreas. Central se juntó mejor y pudo jugar más cerca de Arias. Pero no tuvo peso en los últimos metros. Racing no encontró espacios detrás de los volantes rosarinos. Por eso, la pelota les llegó pocas veces a sus delanteros. Y los arqueros Broun y Arias pasaron una noche tranquila.

Recién en los últimos diez minutos y con dos corners, Central generó algo de peligro. En uno, Sandez se llevó la pelota por delante y la hizo dar en el palo izquierdo. En el otro, Barbieri se la bajó de cabeza a Copetti, que de la misma manera, la mandó por arriba del travesaño. Racing solo se arrimó con una pelota que el uruguayo Martirena desde la derecha le cambió a Rojas que, entrando por la izquierda, remató de zurda y desviado. 

El gol de Luciano Vietto a los dos minutos de la segunda etapa cambió el clima del partido, que se tornó cortado y nervioso, dentro y fuera de la cancha. Central perdió fluidez en el manejo de la pelota y quiso empatar pechando. Mientras que Racing se afirmó mejor en la media cancha donde volvieron a hacerse fuertes Nardoni y Zuculini y no lo dejó acercarse a Arias.

 A los 33 minutos, Matías Sandez se fue expulsado y con uno menos, los rosarinos quedaron expuestos. Y a los 44, Carbonero presionó al arquero Broun que se equivocó en la salida y "Maravilla" Martínez con un remate colocado por encima, selló la séptima victoria consecutiva de Racing y le abrió paso a la ilusión académica de celebrar un nuevo título antes de fin de año.