La extitular del PAMI y diputada nacional de Unión por la Patria, Luana Volnovich, cuestionó por la 750 la decisión del Gobierno de Javier Milei de quitar la entrega de medicamentos gratuitos para los afilados de manera directa, como parte de los derechos elementales de los jubilados.

La crítica llega luego de que el PAMI anunciara que restringirá la entrega de medicamentos a los jubilados y pensionados que tengan ingresos netos menores a 1,5 haberes previsionales mínimos. Es decir, aquellos que ganen menos de 388.500 pesos.

De todos modos, quienes cumplan con estas bases deberán realizar un trámite de inscripción con el objetivo de solicitar el “subsidio social”. Para poder calificar dentro del subsidio, los afiliados tampoco podrán estar afiliados a una prepaga, tener más de un inmueble, un vehículo de menos de diez años ni ser dueño de bienes de lujo.

“Hay que entenderlo en el marco de que los jubilados cobran cada vez menos, que hubo un veto a los aumentos: es parte de una mirada que tiene el Gobierno del Estado de retirarse de la vida de los argentinos”, señaló Volnovich.

Y recordó cómo esto fue algo que advirtieron desde el PAMI que haría la gestión neoliberal si llegaba al poder: “Ayer miraba, cuando pasó todo esto, los videos de la campaña. Nos decían que era campaña del miedo, pero decíamos que iban a sacar los medicamentos, y hoy el Gobierno anuncia que se terminó el programa”.

Tras lo que ponderó esta decisión: “Es tremendo, porque es un impacto al bolsillo y a la tranquilidad. Porque era un salario indirecto”. Y explicó que correr al Estado implica dejar de lado un jugador que, a la hora de negociar con los laboratorios, tiene un peso mucho mayor que el que tiene cada ciudadano de manera individual.

“El Estado nacional hacía la inversión por vos. Eran gratis para la gente. Pero eran medicamentos que el Estado compraba en muchas mejores condiciones. El PAMI podía afrontar las negociaciones con los laboratorios, lo que permitía bajar los precios y hacer que esta política fuera sustentable”, señaló.

La diputada recordó que si bien la oposición afirmaba que “era imposible de pagar” este programa, en su gestión se garantizaron medicamentos gratis durante cuatro años y se terminó con “un superávit de 250 mil millones de pesos”.

“Es mentira que no hay plata. Lo que hay es definir prioridades: hacia dónde va la plata y cómo gobernás, si gobernás para los ricos o para los jubilados”, afirmó cuestionando cómo los jubilados perdieron sus ingresos mientras los jugadores de la timba financiera incrementaron sus ganancias en dólares.

“Cuando a Argentina le va bien, al PAMI le va bien; y cuando al país le va mal, al PAMI le va peor. Porque depende de la recaudación automática. Todas las decisiones impactan en el PAMI. Cuando vamos para abajo, los salarios, la seguridad social, el PAMI tiende a recaudar menos”, afirmó.

Y puso la lupa sobre otra medida que pegará en los jubilados: “El Impuesto PAIS es un impacto importante, porque era parte de una ley que decía que una parte iba al PAMI. Eso no se prorrogó, para darle un beneficio más a los importadores, y eso hace que ingrese menos plata”.

Para los ricos hay un veranito financiero: el 40 por ciento en dólares para los que timbean, el blanqueo para los que no pagaron sus impuestos, pero, en paralelo, un jubilado cobra menos de 300 lucas y no le das los remedios”, denunicó.

Finalmente, dijo: “La doble cara de este Gobierno es terrible. Yo a veces escucho la sensación de optimismo que hay, pero esa no es la realidad de todos los argentinos. Hay 5 millones de jubilados que ya volvieron a tener que pedirle a sus hijos que les ayuden. Es un grado de insensibilidad que no voy a decir que me sorprende”.