Las políticas aplicadas por el gobierno de Javier Milei determinaron un fuerte deterioro en la situación socio-económica de los adultos mayores. Esto se debe a una serie de factores que vienen actuando al mismo tiempo. Por un lado, el notable aumento en los precios de los medicamentos; por otro, el ajustazo sobre las jubilaciones junto a la disparada de las prepagas, advierte un informe elaborado por el Centro de Economía Política Argentina (CEPA) junto a la Asociación Latinoamericana de Gerontología Comunitaria (Algec) y el Centro de Estudios Políticos para Personas Mayores (Ceppema).
"El inicio de la era Milei y el auge de la desregulación económica trajo como consecuencia una fenomenal aceleración de los precios, con un impacto altamente negativo en el rubro de medicamentos. A la par, el Gobierno decidió congelar el bono de 55 mil pesos para quienes cobraban haberes menores a 160.712,61 pesos en enero y febrero y aumentarlo a 70 mil pesos en marzo para volver a quedar congelado durante todo 2024 para quienes cobraban hasta 1,5 mínimas", indica el informe.
En concreto, desde que Javier Milei ganó el ballotage y anticipó una desregulación total sumada a una brutal devaluación, en noviembre de 2023, los medicamentos que las personas mayores utilizan habitualmente alcanzaron en promedio una inflación acumulada del 210,7 por ciento, por arriba de la ya elevada inflación de ese mismo período, del 201,5 por ciento, detalla el informe especializado.
Entre los medicamentos que más aumentaron en la comparación interanual están el DAFLON 500, un venotónico utilizado para aumentar la tonicidad de las venas y vasculoprotector utilizado para aumentar la resistencia de los pequeños vasos sanguíneos, que subió 228 por ciento, y la ASPIRINA PREVENT, un antiagente plaquetario utilizado para reducir el riesgo de morbilidad y mortalidad en pacientes con antecedentes de infarto de miocardio, angina de pecho, angioplastia coronaria, ACV no hemorrágico, que lo hizo en un 217 por ciento.
El OPTAMOX DUO, antibiótico de amplio espectro, muy utilizado en enfermedades respiratorias tales como, anginas, faringitis, traqueítis, bronquitis, sinusitis, otitis media y neumonías, acumula un alza interanual del 197 por ciento, al tiempo que el IBUPIRAC, es uno de los antiinflamatorios no esteroideo (AINE) más utilizado para combatir dolores y fiebre, utilizado en personas mayores para combatir lumbalgia, dolores musculares, hombro congelado (capsulitis), osteoartritis, espondilitis anquilosante, artritis reumatoidea, poliartritis crónica, bursitis, tendinitis, lo hizo en un 190 por ciento.
Tampoco es que el problema de los precios de los medicamentos comenzó este año ni mucho menos. Sin ir más lejos, Eugenio Semino, defensor de la Tercera Edad en la Ciudad de Buenos Aires y Presidente de la Sociedad Iberoamericana de Gerontología y Geriatría (SIGG), advierte que "hace dos años y medio venimos hablando de crisis humanitaria en el sector. Los remedios en 2023 aumentaron 300 por ciento frente a una inflación de 211 por ciento y en lo que va de 2024 ya subieron cerca de 200 por ciento, mientras que la inflación acumula 115 por ciento. Más allá de la macroeconomía y de que los mercados funcionen bien, la que se muere es la gente y el jubilado ya no soporta más”.
Ingresos
El aumento nominal de las jubilaciones en diciembre es del 2,69 por ciento, en línea con la inflación de octubre, de acuerdo a lo que establece la nueva movilidad jubilatoria definida por el gobierno de Milei. De este modo, la jubilación mínima sube hasta los 259.599 pesos. A esto se le suma el bono de 70 mil pesos, con lo cual el piso de haberes llega a los 329.599 pesos. En particular, diciembre es un mes algo más holgado, porque se percibe el medio aguinaldo, de 129.800 pesos para la mínima.
Si el bono hubiera mantenido su poder adquisitivo, actualmente debería estar en algo más de 100 mil pesos por mes. De modo que la jubilación mínima con bono de diciembre de 2024 presenta una caída del 6,6 por ciento real con respecto a igual mes del año pasado.
La contracara de los ingresos de los jubilados es el ajuste fiscal. De acuerdo al especialista Nadín Argañaraz, titular del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), el resultado fiscal positivo que el Gobierno celebra se explica por una caída del gasto del orden del 23 por ciento en términos reales. Esa baja se explica, en un 24 por ciento, por la situación de las jubilaciones y pensiones.
“Festejan el superávit fiscal y el jubilado lo paga con su vida“, grafica Semino. El Defensor detalla que “nosotros atendemos 300 o 400 reclamos de jubilados por día. El 80 por ciento son por temas de prestaciones de salud y la imposibilidad de comprar la medicación”.