Según el gerente de la Cooperativa Eléctrica de General Viamonte, formar parte del Plan Verano representa "una tranquilidad" para la empresa y "una mejora directa" en el servicio eléctrico que brindan a la comunidad. Es el tercer año consecutivo que la localidad queda incluída en la política con la que la Provincia de Buenos Aires busca evitar los cortes de energía durante los meses de mayor demanda y Alejandro Gil agradece no tener que estar pensando en los cortes rotativos que el año pasado tuvo que aplicar para ahorrar y evitar el colapso del sistema. 

El Plan Verano, implementado por el Ministerio de Infraestructura y Servicios Públicos de la Provincia de Buenos Aires desde hace tres años para el período estival, apunta a reforzar el sistema eléctrico durante los meses de mayor consumo. En esta edición, el municipio de General Viamonte recibirá 4,2 MW de potencia adicional mediante Unidades de Generación Temporales (UGT), que son un conjunto de generadores de baja potencia que utilizan como fuente primaria combustible como el gasoil.

Esta medida no solo beneficia al municipio cuya cabecera es Los Toldos y que además cuenta con la localidad de Baigorrita, sino también a distritos vecinos como Junín, Zábala, O’Brien, Warnes, El Arbolito y Mariano H. Alfonso, entre otras. A su vez, la asistencia se extiende a otras regiones como Carmen de Areco con 4 MW de potencia; 25 de Mayo con MW; 9 de Julio, 4 MW; Pergamino, 5,7 MW y Mar del Tuyú con 2,1 MW de potencia.

Un problema histórico

La Cooperativa Eléctrica de General Viamonte es una de las 200 cooperativas de servicios públicos que operan en el interior bonaerense. Su labor principal es distribuir la energía eléctrica que recibe de las estaciones de subtransmisión. De esta manera, abastece a más de 8 mil usuarios, incluyendo residenciales, comerciales, industriales y rurales. El resto del área de cobertura se distribuye entre otras cooperativas más chicas que cubren una gran extensión rural, según aclaró Gil a este medio. En el distrito viven 22.649 bonaerenses de acuerdo al último censo.

Gil detalló que uno de los mayores desafíos que la cooperativa enfrentó a lo largo de los años fue la falta de capacidad suficiente para cubrir la demanda durante el verano. Y en el 2020-2021, la situación alcanzó un punto crítico: "Tuvimos que implementar cortes rotativos de dos horas por zonas para evitar el colapso total del sistema. Esto no solo generaba estrés en el servicio, sino también un impacto negativo en la comunidad, afectando hogares, industrias y servicios esenciales como hospitales y sistemas de agua”.

Estas interrupciones no solo generaban caos operativo, sino que también perjudicaban la calidad de vida de los vecinos. "Era desgastante para la comunidad y para la cooperativa. Los cortes afectaban incluso a usuarios sensibles, como electrodependientes o centros de salud, el Plan Verano nos permitió salir de esa situación crítica" agregó.

Gil detalla cómo funciona el sistema de abastecimiento de la cooperativa: "Nosotros tomamos la energía en el punto de suministro y la distribuimos a nivel local. Si la energía que llega es insuficiente o de mala calidad, debemos restringir el suministro para evitar daños mayores. Esto requiere una gestión minuciosa, especialmente en verano, cuando la demanda se dispara".

Con un equipo de 40 empleados, el trabajo de la cooperativa no solo consiste en distribuir energía, sino también en gestionar estrategias que aseguren la continuidad del servicio. "Nuestro rol va más allá de la distribución. Nos comprometemos con la comunidad porque nosotros mismos somos usuarios. Conocemos de cerca las necesidades, como las de los electrodependientes o los comercios esenciales, y trabajamos para que el impacto de los cortes sea mínimo," explicó Gil.

En simultáneo, la cooperativa colabora activamente en estudios de cargabilidad y mantenimiento de infraestructura. En los últimos años, se impulsaron actualizaciones en estaciones transformadoras y líneas de transmisión. Entre estas mejoras se destaca la modernización de la estación de Transba (Transporte de Energía Eléctrica por distribución troncal en la Provincia de Buenos Aires) en Bragado y de la subestación de Viamonte, con la incorporación de reguladores de tensión en 33 kV.

Resultados del Plan Verano y expectativas para el 2025

Según Gil, el Plan Verano tuvo un impacto significativo en la mejora del suministro eléctrico: "Los resultados son positivos. Desde que la Provincia nos incorporó a este plan, no tuvimos que recurrir a cortes rotativos gracias a las unidades temporales de generación. Esto dio estabilidad al sistema en los momentos de mayor estrés."

Para la temporada 2025, la expectativa es alta. Las mejoras en infraestructura combinadas con la asistencia del Plan Verano generan optimismo. "Creemos que este será el último año en que necesitemos generadores temporales. Las obras en curso, como la actualización de líneas entre Junín y Viamonte, permitirán sostener la demanda en el futuro sin recurrir a soluciones transitorias," afirmó el gerente.

Sin embargo, a pesar de los avances, Gil expresó preocupación y se mostró cauteloso ante la quita de subsidios y el impacto económico en los usuarios: "Vemos cada vez más dificultades para que las familias puedan afrontar el pago de las facturas. Además, el freno en la obra pública podría generar un retroceso en los avances logrados de cara al próximo año”.

En este proceso, Gil destacó el rol clave de las autoridades provinciales encabezadas por el subsecretario Gastón Ghioni y del director provincial Marcelo Garrido que, en sus palabras, "permitió pasar de un escenario caótico en 2020-2021 a un presente más estable".

Finalmente, Gil destacó la importancia de las cooperativas como actores clave en el sistema eléctrico: "Somos empresas de economía social, no buscamos lucro. Conocemos a nuestros usuarios y sus necesidades. Para nosotros, un corte de luz no es solo un número; es un vecino, un hospital o una escuela que queda sin servicio. Esa cercanía nos impulsa a buscar soluciones sostenibles”.

El Plan Verano, junto con las obras de infraestructura en marcha, representa un paso importante hacia un futuro energético más estable para General Viamonte y las localidades cercanas, de acuerdo a lo comentado por Gil. La expectativa es que estos avances sienten las bases para un sistema reforzado y eficiente en los años venideros.