El Ejecutivo provincial vio luz al final del túnel y mandó nomás el paquete de proyectos que quiere convertido en leyes en período de Extraordinarias, que irá hasta el 1° de mayo. Y entre esos -10 en total-, se cuenta el más urgente, que deberá tomar forma hoy mismo como dictamen síntesis: la ley que declare necesidad de Estado a la reforma de la Constitución de la Provincia de Santa Fe. Señal de que el oficialismo cree haber logrado el consenso suficiente.

Fue posible a partir de rectificar la ofensiva inicial y abrir el diálogo y la participación del arco político que desde anteayer desfila por la comisión de Asuntos Constitucionales, que preside el socialista Pablo Farías. Hasta ayer, persistía la negativa de la mayoría del justicialismo en convalidar la reforma. Prevalecía el documento orgánico del partido en el que le atribuye a la iniciativa oficialista un mero afán reeleccionista para el gobernador Maximiliano Pullaro. Lo mismo reprocha el bloque Somos Vida, liderado por Amalia Granata.

De todos modos, el frente Unidos ya no requiere de tantas anuencias en la oposición. Le alcanza con haberle escamoteado cuatro votos de los 5 que detenta el bloque Hacemos Santa Fe, referenciado en Omar Perotti. El que votará en contra en esta bancada -como este diario publicó ayer- será el ex ministro de Economía Walter Agosto.

Además del perottismo, Unidos cuenta también con dos votos del Frente Amplio por la Soberanía y con el del peronista disidente Juan José Piedrabuena. Suficiente para aprobarlo enseguida y girarlo al Senado, donde sí tiene dos tercios propios asegurados para la sanción definitiva. 

Pero Pullaro envió ayer a Legislatura un total de diez iniciativas para Extraordinarias. La necesidad de reforma constitucional fue el último ítem del paquete. Se cuentan, además, la ley de Presupuesto 2025, la ley tributaria, una reforma a la ley procesal penal y al régimen del Servicio Penitenciario, la creación del programa Boleto Educativo Gratuito, ampliación de la cárcel de 27 de Febrero al 7800, y otra norma que prohíbe "la designación preferencial de personas en cargos y empleos públicos fundada en vínculos de parentesco con agentes estatales": en resumen, la eliminación del sistema de ingreso de personal a la Empresa Provincial de la Energía.

Para el último lugar, entraron un total de 10 proyectos que abrevan en el llamado a la reforma constitucional. De inmediato, el oficialismo retomó la cuerda y amplificó.

"El gobernador envió el temario que incluye los proyectos que están en la Legislatura sobre Ley de Necesidad (de reforma constitucional) encabezados por el que presentamos desde el bloque Socialista en febrero, que fue nada más y nada menos que el enviado por nuestro querido Miguel Lifschitz en 2018", memoró Joaquín Blanco. Y aseguró que la propuesta de ese partido "es solo el punto de partida, vamos a trabajar con todos los autores y todos los bloques para que la versión que llegue al recinto sea la más enriquecida posible. Queremos una reforma que cuide lo mejor de nuestra provincia y a su vez sea un puente hacia el futuro", abundó.

Eso es precisamente lo que fluye desde el lunes en Asuntos Constitucionales, con la expectativa de llegar a hoy con un dictamen de consenso entre todas las propuestas, y darle media sanción el jueves en Diputados, y sanción final el viernes en Senado. 

Mientras tanto, en el PJ seguía ayer crepitando la fisura. Cerca del presidente Guillermo Cornaglia se mencionó la posibilidad de expulsar del partido al propio Perotti y sus alineados. Pero una de ellos, la diputada Celia Arena, le bajó el tono a la polémica, esgrimió la vocación reformista histórica del peronismo en este debate.

Asimismo, recordó el paso de Cornaglia por el Senado. En este punto, insinuó la revancha de traer al presente todas las veces que la ex mayoría peronista de esa cámara le votó las leyes que pedían los gobernadores del Frente Progresista. "Es un debate muy interesante para dar, porque podríamos discutir todas las veces que los legisladores justicialistas votaron leyes con mucho impacto y que favorecieron a los gobiernos de la oposición durante 12 años. Podríamos dar un debate muy interesante", chicaneó la legisladora a una radio santafesina.

Con todo, el perottismo procura calmar las aguas internas aclarando que no le dará un cheque en blanco a Pullaro. Por cierto, su proyecto de reforma contempla la reelección del gobernador, pero no en este mandato, sino a partir del próximo. De todos modos, esa cuestión será modificada, una tarea que determinarán los futuros convencionales de la Asamblea Constituyente.