En apenas un año, la pobreza entre les menores de 17 años aumentó del 62,9% al 65,5%, y la indigencia al 19,2%, mientras que la inseguridad alimentaria alcanza un 24,3% y la insuficiencia alimentaria severa subió del 5% al 11,8%. Solo 1 de cada 10 hogares urbanos tiene capacidad de ahorro. Los datos se desprenden del informe del Observatorio de la Deuda Social Argentina, “Deudas sociales en la Argentina del siglo XXI (2004-2024). Fin de ciclo y futuro abierto”.
Para este tercer trimestre, la pobreza escaló del 44,7% al 49,9% y la indigencia del 9,6% al 12,3%. Sobre una población de 47 millones, cerca de 24 millones de personas son pobres: entre las franjas más perjudicadxs se encuentran niñeces y trabajadorxs.
El último análisis de UNICEF sobre la situación de la niñez y adolescencia en hogares liderados por mujeres, amplía este foco sobre la situación de las maternidades y niñeces, en tanto más de la mitad de las madres que viven en la Argentina no reciben la cuota alimentaria (56%) cuando el padre no habita en la vivienda, y esa proporción asciende (68%) si se toma en cuenta a quienes no la reciben de manera regular.
“Además, entre quienes no reciben este dinero, 6 de cada 10 indica que el progenitor tampoco se hace cargo de otros gastos de manera directa y, entre las que sí, un 24% afirma que no es suficiente para cubrir los gastos de las niñas y los niños”, detalla el informe. “Entre los motivos por los cuales los padres no pagan la cuota alimentaria, se destaca la falta o la mala relación con la madre y/o con las niñas y los niños (61%), y en un 24% es por falta de trabajo o insuficiencia de ingresos.”
El análisis se desprende de la octava encuesta a hogares con niñas, niños y adolescentes de UNICEF, y revela que los niveles de pobreza infantil en hogares con jefatura femenina (65%) y en los monomarentales (67%) son más altos que en los liderados por varones (53%). “La pobreza en la niñez y adolescencia en Argentina es un problema estructural: nunca bajó del 30% en los últimos 40 años.”