Tras la situación que vivió Rodrigo Rey, el arquero de Independiente que denunció un caso de discriminación padecido por su hijo con Trastorno de Espectro Autista (TEA), el senador Emmanuel González Santalla pidió por la aprobación del proyecto de ley de su autoría que propone la capacitación obligatoria, gratuita y con puntaje en TEA y neurodiversidades y que ya cuenta con media sanción de la Cámara Alta.

“El caso de Rodrigo Rey refleja la realidad que enfrentan miles de familias y es necesario visibilizar para que todos los chicos y chicas puedan ser incluidos en el sistema educativo”, señaló el diputado oriundo de Avellaneda. El jugador, que meses atrás había encendido las luces de alarma sobre la manera en que el Instituto José Manuel Estrada de City Bell abordaba la educación de su hijo Benicio, recibió la notificación desde la escuela que, tanto él como Renata, su hija, no tendría lugar dentro de la escuela el próximo año.

“Seguimos esperando con la ilusión de mirar a nuestro hijo menor a los ojos y contarle que sí, que el año que viene va a poder seguir yendo al curso con sus amigos y amigas, con esos que lo cuidan cuando en el recreo o en el aula hay mucho ruido, con esos que en los actos piden que se hable bajito o no aplaudan porque a Beni le hace mal, con esos que le dejan hacer los goles de penal y lo festejan todos abrazándolo”, fue una de las frases de Rey en un posteo que agradeció el acompañamiento de la sociedad a su causa que, espera, resuelva la Justicia.

Para muchos que están al tanto de la situación, la decisión del instituto platense estuvo motivada en una publicación de Rey en junio de este año. En aquel entonces, tras 15 días de estar en su casa, Benicio volvió a la escuela. A las horas, la acompañante del niño le envió una foto a los padres sobre el espacio de calma que la institución le brindó: una colchoneta en la que ni siquiera entraba todo el cuerpo del nene.

En ese entonces, Laura, la esposa de Rey y madre de Benicio y Renata, también habló al respecto. “Me tocaron el punto más sensible pero también el más guerrero. Tuve un hijo que llegó al mundo sin esperanza de vida. Que sobrevivió a dos cirugías recién nacido. Quedando solo con 60 cm de intestino y un pronóstico desolador. Una de las posibilidades era alimentarse toda su vida por una máquina, entre otras cosas. Durante sus primeros 4 años, durmió más en hospitales que en su propia casa. Su déficit inmunológico hace de sus inviernos un gran desafío, y todo ese contexto termina en un diagnóstico de TEA”, publicó Laura.

Ambos padres denunciaron la “falta de respeto” que vivió su hijo. Meses después, en octubre, les comunicaron que directamente no les renovarán la matrícula, tanto a él como a Renata, que está a dos años de terminar el secundario, planificando su viaje de egresados y su graduación.

En este marco, Santalla explicó que su proyecto ya cuenta con la aprobación del Senado y está a la espera de su tratamiento en la Cámara de Diputados en los primeros meses del próximo año. Según detallaron desde su equipo, “tiene como objetivo capacitar no solo a los docentes, sino también a todo el personal técnico-administrativo, profesional, auxiliar y de servicio de instituciones públicas y privadas de gestión estatal, abarcando todos los niveles y modalidades del Sistema Educativo Provincial”.

“El Estado tiene la responsabilidad de garantizar la igualdad de oportunidades, no solo nuestros hijos deben estar integrados al sistema educativo sino también incluidos en el proceso de aprendizaje”, remarcó Santalla.