Perón GPT, un chatbot creado con inteligencia artificial que elabora sus respuestas desde la doctrina peronista, irrumpió esta semana en un escenario digital saturado de discursos de odio e individualistas. "Soy una sombra digital de su pensamiento, una especie de memoria activa que recoge sus ideas y las pone a disposición de quienes quieran debatir, aprender o simplemente charlar", dice de sí misma la voz de Juan Domingo Perón hecha de ceros y unos.
Este chatbot, que funciona en la interfaz de Chat GPT, usa inteligencia artificial generativa para elaborar sus respuestas. La mayoría de las veces, las devoluciones que hace incluyen la palabra "compañero" y evitan las afirmaciones controversiales. Ante la pregunta obvia --qué opina del presidente Javier Milei--, el Perón virtual da una respuesta contundente: "Milei representa una visión liberal que contrasta con los principios del justicialismo, ya que prioriza un mercado sin intervención estatal, mientras nosotros creíamos en un Estado presente, garante de la justicia social". Pero sus afirmaciones no se limitan a responder solamente preguntas políticas. También es un juego.
¿Qué tiene en sus circuitos Perón GPT?
El chatbot que responde desde el pensamiento de Juan Domingo Perón tiene "cargada" en su base de datos todos los libros que escribió Perón, algunos intercambios epistolares y la desgrabación de las entrevistas que Pino Solanas le hizo al expresidente en Puerta de Hierro, cuenta a Página|12 Gonzalo Navarro, periodista y creador de Perón GPT. "También está cargado el plan quinquenal y algunos otros documentos históricos del peronismo. Además de eso, tiene algunas instrucciones precisas incorporadas por mí", agrega.
La idea de traer la voz de Juan Domingo Perón a la actualidad "surgió a partir de ver qué otros usos se le estaba dando a este tipo de inteligencia artificial generativa y mirando contenidos de otros países", asegura su creador. Usualmente, este modelo de lenguaje es útil para la realización de tareas automatizadas o como asistente para la generación de contenido.
"Se me ocurrió que un Perón GPT sería divertido porque, casi siempre, frente a alguien que no está aparece la pregunta ¿qué diría fulano? Y es raro contestar esa pregunta. Cuando una persona contesta eso, me parece que siempre es incómodo. Entonces, me gustó el juego de poner una inteligencia artificial generativa a ocupar ese lugar", apunta Navarro.
La génesis de Perón GPT se asocia a una "búsqueda en torno a los límites de la inteligencia artificial generativa", que se reformulan constantemente. Como todos los desarrollos de este estilo, las respuestas pueden tener errores, según las exigencias de cada consultante. Por ejemplo, cuenta su creador, que cuando le preguntó por sus 5 platos favoritos, Perón GPT no mencionó al pastel de papa, la comida preferida de Perón.
Es importante "ir reconociendo las limitaciones también para estirarlas o moldearlas a las necesidades, y llegado el caso también moldear las expectativas, jugar un poco", considera. Perón GPT interactúa desde un sesgo, que trata de asemejarse al pensamiento de Perón, ahí, "las respuestas propenden a ser más edificantes, en ese punto puede tener un uso, hoy día que el Manual de Conducción Política parece no ser un bestseller", completa Navarro.
Perón GPT y su aporte al debate político
Lejos de brindar una solución irrefutable a los problemas del presente, la irrupción de Perón GPT pretende apropiarse de la tecnología disponible y dejar su marca en un mundo digital cooptado mayoritariamente por los discursos de odio, fogoneados desde el gobierno ultraderechista. "Es algo en lo que el peronismo siempre tuvo como virtud y ahora aparece como una deuda", evalúa el creador del chatbot.
Desde la hipersegmentación de las campañas políticas en la elección de 2015, hasta la meteórica carrera mediática de Javier Milei que lo depositó en el sillón de Rivadavia en menos de seis años, el peronismo "corrió de atrás" a las nuevas narrativas que se gestaban en las redes sociales, completa Navarro y recuerda la irrupción de los blogs -hace más de 15 años-- como un buen ejemplo de cómo el peronismo pudo ser pionero en entornos digitales.
"Si algo puede aportar al debate es eso, la necesidad de no dejarla pasar esta vez y ver que esta tecnología está, que su paso está siendo arrollador, o va a ser arrollador, y que el 2025 que va a estar signado por la inteligencia artificial", asegura el también docente de comunicación digital. De todas maneras, reconoce que la apropiación de una tecnología "siempre es problemática y tiene un lado oscuro".
"Hay que ver de qué manera uno se apropia de eso, aunque sea problematizándolo y discutiendo con esa tecnología, y llegado el caso: pensando qué otra cosa se puede desarrollar, o qué control de daños se puede hacer. Pero la inteligencia artificial generativa está acá, está entre nosotros. Esta búsqueda, tal vez, signifique alguna clase de aporte", finaliza.