Al día 13 de búsqueda del submarino ARA San Juan, la Armada confirmó que aún no hay novedades de la embarcación y que continúa el operativo montado con cooperación internacional en la zona donde fue detectada “el evento consistente con una explosión”, un área de 4.000 metros cuadrados. “Son horas de mucha incertidumbre, aún no lo podemos localizar. La situación es incierta”, fueron las palabras de Enrique Balbi, vocero de la fuerza, para confirmar que por ahora ningún sonar pudo detectar el submarino.
“Nuestra zona es muy amplia, con mucha superficie y las profundidades no ayudan. Es una situación muy complicada, crítica, angustiante y de tensión para los familiares y para todos los integrantes de la Armada”, sostuvo el vocero que aclaró que hasta ahora sólo hubo ecos falsos. Balbi describió que los minisubmarinos de Estados Unidos ya se encuentran en la zona de operaciones a diferencia de los enviados por Rusia, que pueden sumergirse hasta los mil metros de profundidad, que llegarán en los próximos días.
El vocero también descartó que la Armada haya filtrado el documento que reconocía la avería que tuvo el ARA San Juan antes del último contacto y que habría sido resuelta. Sin embargo, la filtración obligó a describir el problema que pudo haber tenido como consecuencia la explosión en el submarino, que oficialmente se confirmó el jueves pasado.
“Fuimos confirmando cada indicio que tuvimos”, sostuvo Balbi, que detalló que habría entrado agua por el snorkel del submarino y que llegó hasta la batea de baterías, lo que habría generado un cortocircuito y un principio de incendio de humo sin fuego. El incidente habría llevado a la tripulación a aislar el compartimento con baterías de la proa y continuar con el de popa.
Sin embargo, Balbi confesó que en un primer momento la Armada pensó que ese cortocircuito habría afectado el sistema de comunicaciones y que sólo con la confirmación de la “anomalía hidroacústica” y el “evento sonoro consistente con una explosión”, confirmado por agencias internacionales, pensaron en que el desperfecto de las baterías pudo haber ocasionado una explosión por hidrógeno.
“Todas las baterías generan hidrógeno, por lo que hay que forzar una ventilación. Los mismos motores son los que sacan el hidrógeno por el caño de escape”, explicó el vocero y dio a entender que si lo que falló fue el suministro eléctrico los motores no continuaron con la ventilación. Por último Balbi confirmó que no hay fecha para finalizar la búsqueda, por lo que el operativo continuará hasta encontrar al submarino.