Racing cerró su año futbolístico con una trabajosa victoria por 1 a 0 ante River en el Cilindro de Avellaneda. Maximiliano Salas de cabeza en el primer tiempo marcó el único gol y le decretó a River una derrota que lo obligará a esperar los resultados de la definición del campeonato para saber si va a la fase de grupos de la Copa Libertadores o entra en la fase dos del repechaje.
Desde el principio de la noche, Racing jugó como si todavía tuviera chances de salir campeón. Intenso, activo y metido en el partido como para ganar casi todos los rebotes y las pelotas divididas, la actividad de la Academia, aunque a veces algo pasada de revoluciones, contrastó con la abulia de River. Si a eso se le suman la pegada y la visión de "Juanfer" Quintero, se tendrá porque Racing terminó ganando.
A los 34 minutos, el colombiano puso un córner en la cabeza de Salas que solo tuvo que girar el cuello para anotar el 1 a 0. El mismo Salas pudo haber marcado el segundo seis minutos más tarde. Pero después de una corrida desde más atrás de la media cancha, su zurdazo cruzado se perdió junto al palo izquierdo de Armani que poco antes, le había tapado un mano a mano.
Había sido tan pobre lo de River que de vuelta para la segunda etapa, Gallardo movió la estantería e hizo tres cambios. Entraron Borja, Aliendro y "Pity" Martínez y salieron Colidio, Simón y Echeverri. Y las variantes revitalizaron al equipo que se adelantó en la cancha y ganó en empuje y juego. Arias se hizo figura al sacarle dos pelotas de gol a Martínez y luego dos cabezazos a Solari y Aliendro.
Después de los 25 minutos, Racing pudo emparejar y hasta tuvo chances de aumentar. Pero en el balance de la noche, River debió haber empatado. Ahora tiene que esperar unas horas para saber su suerte en la Copa Libertadores.