El caso Kueider, ampliamente informado en este diario y comidilla de todo el periodismo argentino y paraguayo de esta semana, sigue arrojando chispas a diestra y siniestra, sobre todo ante cierto discurso autista del presidente Javier Milei, que parece no ser del todo consciente de la gravedad del caso.

O quizás le sobre audacia para superar el despiporre, que no es pequeño.

Como es obvio, esta colu