El ministro de Desregulación del Estado, Federico Sturzenegger dice ser un fanático de la saga de La guerra de las galaxias. A tal punto, que cuando era presidente del Banco Central en tiempos de Mauricio Macri, había decorado su oficina con objetos alusivos a la creación de George Lucas. Pero su pasión por Star Wars le jugó una mala pasada en las últimas horas, ya que apeló a una situación del Episodio I: La amenaza fantasma, estrenado en 1999, para festejar que la ARCA, la antigua AFIP, obliga a discriminar los impuestos incluidos en las facturas. 

A través de su cuenta en X, afirmó que "la guerra de independencia norteamericana comenzó en protesta por mayores impuestos a la comercialización del té. Incluso la saga de Star Wars comienza cuando la Federación de Comercio quiere imponer nuevos impuestos a las rutas comerciales y el planeta Naboo se resiste a pagarlos".

Sin embargo, la película plantea que la Federación de Comercio no fija impuestos, sino que protesta contra ellos para obtener mayores ganancias. En el film de George Lucas se narra el bloqueo militar que le impone la Federación de Comercio al planeta Naboo para forzar a la República Galáctica y así negociar por una zona de libre comercio sin impuestos.

En la trama, el senador Palpatine presiona por la suba en la presión impositiva y, al mismo tiempo, como Lord Sith impulsa a la Federación a que bloquee a Naboo. El objetivo es hacer implosionar a la República. 

Estas fueron algunas de las reacciones:

En los días previos, en una entrevista, el ministro había admitido que los gobiernos de Fernando de la Rúa y Mauricio Macri, en los que participó, no fueron buenos.  “Yo vengo de dos gobiernos que fracasaron”.

Consideró que en, en base a su experiencia, ahora valora "el rol que tienen estas castas para justamente bloquear el cambio y tratar de que fracasen" y que "obviamente, están ampliamente mejor bajo el paraguas protector de sus intereses que le da el peronismo”. En ese sentido, señaló que “sería extraordinariamente naif e inocente pensar que esas fuerzas no están”.

De momento, a la hora de construir una narrativa, la Fuerza no lo acompaña