Cuando era chico, Leonardo López sufrió acoso escolar, situación que lo llevó a pensar en abandonar la escuela a los 12 años. Ahora, ya de adulto, mira para atrás y actúa al respecto: así nació AlertAR, una inteligencia artificial que busca acompañar a los niños y niñas que sufren bullying y los ayuda a encontrar una salida.
Así lo explicó el ingeniero en telecomunicaciones y experto en inteligencia artificial ante la pregunta de la 750, donde explicó que “hoy en día, con este boom de la IA, se potenció mucho la posibilidad de hacer cosas, tanto buenas como malas”.
“En nuestro caso —dijo López sobre AlertAR— nos interesó hacer un buen uso para la prevención social. En este caso lo que hemos hecho es un desarrollo de un chatbot. Como si fuera un contacto de WhatsApp, donde hablás con un agente de IA que te permite tener un montón de información clave sobre situación de bullying o acoso escolar”.
En base a estas charlas, el modelo lenguaje asesora a los más jóvenes y los va guiando sobre qué cosas pueden hacer y, si se encuentran en una situación de tener que pedir ayuda, brinda una lista de contactos.
“Es un desafío para los chicos poder hablar el tema. Muchas veces se sienten más cómodos escribiendo con el celular que a lo mejor generando un espacio de diálogo más formal. Ya sea en las casas o en la escuela. Los mismos chicos se reúnen, se juntan, y entre ellos chatean”, comentó López sobre el soporte.
Y añadió sobre su implementación: “Tenemos una opción 100 por ciento gratuita para las escuelas que no tienen los medios. Se los habilitamos a través de Telegram. Y tenemos también una versión premium a través de WhatsApp con más recursos y mediante una mínima suscripción nos permite sostener el proyecto”.
Con un historial emprendedor destacado, en 2011 López realizó un proyecto llamado Seguridad Ciudadana, que fue reconocido con el premio Capital Semilla. Luego, tras graduarse como ingeniero y completar una maestría en Ciencia de Datos, lideró proyectos con impacto social como AlertAR y el Mapa Nacional del Bullying.
