El Real Madrid se consagró campeón de la Copa Intercontinental al ganarle 3-0 en la final al Pachuca de México en el estadio Lusail de Qatar. Con los goles de Kylian Mbappé, Rodrygo y Vinicius de penal, el Real alzó el título internacional número 32 de su historia, y su cuarta Copa Intercontinental después de las obtenidas en 1960, 1998 y 2002.

El equipo español la tuvo complicada en el primer tiempo, con apenas una llegada concreta pero con varias intervenciones del arquero Thibaut Courtois, que evitaron la caída de su valla. Fueron en total cinco los remates mexicanos en ese lapso.

Pero con toda la jerarquía de su lado, el primer gol del Madrid llegó a los 37 de la primera etapa con una gran jugada colectiva desde el mediocampo y el desborde del brasileño Vinicius, quien culminó con el pase atrás para que el francés Mbappé la empujara al arco casi vacío.

En el inicio de la segunda etapa, a los ocho, el Madrid salió con todo y tras unos pases fuera del área, Rodrygo rompió la defensa mexicana y después de avanzar de derecha a izquierda, definió al segundo palo para meter el 2-0.

En el final del encuentro, Vinicius encaminó la goleada con penal, ejecutado muy flojo por parte del brasileño y que casi ataja Carlos Moreno, para coronarse en Qatar.

El regreso de la Copa Intercontinental, pero con un renovado formato muy favorable a los equipos europeos, le permitió al Real Madrid, campeón de la Champions League, acceder directamente a la final.

Por su parte, Pachuca quedó lejos del buen rendimiento que lo llevó a la final de la Copa Intercontinental luego de vencer 3-0 a Botafogo en el duelo de las Américas -una especie de cuartos de final- y derrotar por penales al Al-Ahly egipcio tras igualar en cero en los 120 minutos de juego de la semifinal.