Un centenar de personas migrantes protestaron en el puerto Internacional de San Ysidro, en la ciudad fronteriza de Tijuana, norte de México, ante las amenazas de deportaciones masivas del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump.
Convocados por las organizaciones Alianza Migrante Tijuana, Ángeles Sin Fronteras y SOS Migrante, a propósito de la conmemoración del Día Internacional del Migrante, las personas se reunieron en el albergue Juventud 2000, ubicado a un kilómetro del puerto fronterizo.
Desde ese punto, personas de todas las edades marcharon portando pancartas con mensajes alusivos a Trump y proclamas en contra de las medidas que pretende llevar a cabo el expresidente de EE.UU., que volverá a la Casa Blanca el próximo 20 de enero.
Entre otras consignas, se escuchaba: "Trump, puente sí, muros no", "A México se le respeta" y "Los migrantes somos trabajadores, no delincuentes".
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, anunció que reforzará el apoyo a connacionales mexicanos en consulados en Estados Unidos frente a las amenazas de Trump de deportaciones masivas y el señalamiento directo a México por su supuesta inacción, con acciones como asesorías jurídicas para hacer valer sus derechos.
El reclamo migrante
José María García Lara, director de la Alianza Migrante Tijuana, afirmó que “durante este día no hay nada que festejar, pues no es un festejo, sino una conmemoración hacia nuestros migrantes que buscan mejores condiciones de vida en otros países del mundo”.
El activista destacó el objetivo de manifestar su rechazo hacia las medidas que pretende Trump, “además para propiciar que el gobierno estadounidense sea más sensible ante la necesidad de las comunidades que están migrando por problemas muy fuertes en sus lugares de origen”.
Aseguró que buscan que Trump “sea más sensible”, ya que llevar a cabo las deportaciones masivas de miles de mexicanos por esta zona fronteriza sería muy complejo, además de que “en la administración pasada no hubo esas deportaciones de las cuales ahora se está hablando mucho”.
García Lara remarcó que lo único que esperan es “que Trump entienda esa parte de que hay personas que van buscando mejores oportunidades de vida, ya que muchos han logrado una estadía legal", pero también económica. “No pueden tampoco ser tratados de esa manera y mucho menos meterles esa preocupación de que en su momento van a ser deportados", señaló.