El dólar blue terminó con una caída de 30 pesos y cerró en 1175 pesos. La divisa ilegal venía de varias jornadas de fuerte suba que lo habían ubicado en un pico de los últimos meses esta semana, cuando alcanzó los 1205 pesos. En el mercado aseguran que existen tensiones latentes con el tipo de cambio debido al proceso de apreciación cambiaria que experimentó la Argentina en los últimos y la devaluación de Brasil, que provoco un mayor retraso del dólar oficial. En el gobierno plantean que no tienen una preocupación sobre el punto del tipo de cambio y la autoridad monetaria decidió esta semana lanzar medidas flexibilización de los controles cambiarios.

En detalle, el Banco Central anunció algunas medidas para reducir algunas restricciones cambiarias para las empresas. La primera de ellas permitirá el acceso al mercado oficial de cambios para cancelar intereses compensatorios de deudas financieras con casas matrices del exterior, devengados a partir del 1 de enero de 2025.

Esta decisión, oficializada a través de la comunicación A 8161, elimina el requisito de conformidad previa del Banco Central para estos pagos. Sin embargo, aclara que los intereses adeudados hasta el 31 de diciembre de 2024 y aquellos de tipo punitorio seguirán bajo las restricciones vigentes. "La medida busca reducir los stocks remanentes de deuda en moneda extranjera acumulados por las empresas debido a las limitaciones cambiarias", explicó la autoridad monetaria.

Paralelamente, la comunicación A 8160 introdujo otra flexibilización al permitir la cancelación de emisiones de deuda en moneda extranjera realizadas por fideicomisos financieros con oferta pública, siempre que el monto haya sido previamente convertido a pesos en el mercado oficial de cambios. Según el BCRA, esta decisión fomenta el uso de instrumentos financieros que canalicen el ahorro en dólares hacia inversiones locales.

En lo que refiere a los activos bursátiles, el índice del S&P Merval en dólares profundizó su caída, acumulando un retroceso del ocho por ciento en apenas tres días. La jornada también reflejó movimientos dispares en Wall Street para las empresas argentinas. Entre las mayores bajas destacaron Telecom (-5,8 por ciento), Cablevisión (-5,7 por ciento) y Bioceres (-4,7 por ciento), mientras que Globant lideró las subas con un incremento del 3,1 por ciento. 

Los bonos en dólares no fueron la excepción, registrando caídas de hasta 2,1 por ciento, como en el caso del Bonar 2030, lo que generó un rebote del riesgo país, que subió 0,9 por ciento, ubicándose en 664 puntos básicos. Estas turbulencias se producen en un contexto de incertidumbre internacional, luego de que la Reserva Federal de los Estados Unidos anunciara proyecciones que indican menos recortes de tasas de interés y una inflación más alta de lo esperado para 2025.

En el frente cambiario, el Banco Central acumuló este jueves su decimotercera jornada consecutiva con saldo positivo, al comprar 217 millones de dólares en el mercado de cambios. Este resultado, el segundo más alto del mes, contribuyó a estabilizar las reservas internacionales brutas en 32.242 millones de dólares, apenas 11 millones por debajo del cierre previo.

Sin embargo, las reservas netas continúan en terreno negativo, con un déficit que ronda los ocho mil millones de dólares si se consideran los compromisos futuros, como los pagos del Bopreal. Esta situación limita la posibilidad de avanzar hacia una liberalización total del cepo.

Volviendo a la estrategia del gobierno con los controles cambiarios, desde el Ministerio de Economía repitieron de nuevos que existen tres condiciones para avanzar hacia "el levantamiento definitivo del cepo": convergencia entre inflación y ritmo de devaluación, equilibrio en el mercado de dinero y fortalecimiento de las reservas. 

Este último punto está estrechamente ligado a la negociación con el Fondo Monetario Internacional, que podría incluir un nuevo programa de endeudamiento para el primer cuatrimestre de 2025.

Desde la autoridad monetaria indicaron que las medidas recientes de flexibilización cambiaria buscan atender las restricciones sobre las deudas corporativas y los dividendos impagos. Según datos del Banco Central, a mediados de este año las deudas financieras con empresas vinculadas superaron en 4326 millones de dólares los niveles de 2022. En cuanto a utilidades y dividendos, se estima un stock potencial de 6941 millones de dólares, de los cuales 1200 millones ya fueron canalizados.