El diputado nacional por el Frente de Izquierda, Alejandro Vilca, repudió el asesinato a manos de la Gendarmería Nacional de Fernando Martín Gómez, un joven de 27 años que trabajaba comerciando hojas de coca que traía del orto lado de la frontera con Bolivia. El Gobierno buscó instalar que los trabajadores eran narcotraficantes.

Vilca atendió a la 750 desde Orán, el pueblo donde Gómez fue enterrado, en la provincia de Salta, al límite con Bolivia. Allí contó que enviaron mensajes de apoyo y llevaron la solidaridad "ante un hecho escandaloso: un operativo de la Gendarmería contra trabajadores”.

Según Vilca, esos operativos siempre ocurren en los pueblos de frontera. En el caso del norte, con los que ingresan hojas de coca, que forma parte de un consumo cultural. En este operativo “brutal y represivo” en palabras de Vilca, y parte del recién estrenado Plan Güemes, el corolario fue “un certero disparo en el pecho le quitó la vida a Fernando”.

Además, recordó que el operativo dejó a otras dos personas heridas que están peleando por su vida: un hombre con un disparo en la cabeza y otro en el estómago. “Este hecho provocó el repudio de muchos trabajadores que realizan estas tareas. Al enterarse de lo ocurrido, salieron a la calle y se movilizaron al puesto de Gendarmería, donde se produjeron algunos incidentes”, comentó desde el norte.

Y añadió: “Posteriormente, las fuerzas de la Prefectura y la Policía tomaron la ruta, y ahí continuaron los enfrentamientos, sobre todo en los barrios populares situados al costado de la ruta”.

De hecho, de manera irregular, la policía intentó ingresar a esos barrios populares, pero se los hizo retroceder. “Esto generó una profunda bronca y repudio en una población que vive desplazada en la pobreza”, recordó Vilca.

Desplazada y, con este Gobierno, con menos posibilidades, ya que es una población que “depende de la única fuente de ingreso posible: el comercio de la hoja de coca”. En este contexto, “el ingenio tabacal ya no emplea a más personas, y las fincas ofrecen muy poco trabajo”.

Por eso, sin vueltas, denunció: “Bullrich salió a decir que esto estaba previsto en el marco del plan contra el narcotráfico. Milei, con este operativo represivo contra los pobres, ya tiene su primer muerto”.

“Siempre se trata de manipular las cifras de pobreza para avanzar con el ajuste. No hay obra pública. Entonces, las opciones son emigrar o trabajar de esto, más aún en una fecha tan sensible como fin de año, cuando la gente intenta estirar un poquito más los pocos pesos que tiene”, finalizó.