La entrega de los premios Olimpia al deporte argentino, que anualmente otorga el Círculo de Periodistas Deportivos, generó sorpresa y también debate en su última edición, celebrada el jueves pasado en la Usina del Arte.
El oro fue compartido por Emiliano Martínez y Franco Colapinto. El arquero y el piloto tuvieron actuaciones destacadas en este 2024. El primero ganó la Copa América con la Selección Argentina, fue reconocido por la Federación Internacional (FIFA) con el premio The Best, y aportó para que su equipo, Aston Villa de Inglaterra, esté participando de la actual Champions League, el torneo de clubes más importante del mundo.
Colapinto corrió en la Fórmula 1 las últimas nueve competencias de la temporada para el equipo Williams, y provocó el regreso de un argentino a la máxima categoría luego de 23 años, cuando lo hizo Gastón Mazzacane.
Ambos hicieron méritos suficientes para recibir el máximo galardón. Lo que provocó desconcierto fue que José Augusto Torres Gil, el ciclista que ganó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de París, en la categoría BMX, no haya estado en ese grupo junto a los otros premiados. Argentina volvió a obtener el primer lugar en un podio olímpico luego de ocho años, después de los tres obtenidos en Río de Janeiro 2016.
La decisión de los miembros titulares de la Comisión Directiva del Círculo no se cuestiona, debido que cada uno tiene su preferencia en una votación. Sin embargo, resulta curioso que un premio que se llama Olimpia, no distinga a un campeón olímpico. Según pudo averiguar este diario, se discutió hasta último momento la determinación final, debido a que algunos integrantes pretendían premiar a Colapinto por una cuestión de visibilidad y de marketing.
Otro grupo de la Comisión defendía que la entidad reconoció históricamente los valores y el mérito deportivo, y que no se debería otorgar un premio por esos dos ítems anteriores. En ese conjunto entró en consideración Emiliano Martínez, y también el joven ajedrecista Faustino Oro, el nominado Maestro Internacional más joven de la historia. El Olimpia nunca fue ganado por un chico con edad (11) de escuela primaria.
La decisión fue del presidente Roberto Gerbasi, y hasta habría sido con la fiesta ya comenzada. Ante la gran paridad, se determinó que Colapinto, al que se logró convocar de manera presencial, iba a ser el premiado. De los tres que estaban en la lista, dos no estaban en el país (Martínez y Torres Gil). Por ese motivo, se decidió hacer un reconocimiento al deportista que tuvo la mejor figuración, por Martínez, y destacar como revelación del año al piloto.
La conformidad total no fue tal, ya que algunos miembros entendían que Colapinto lo mejor que hizo fue llegar noveno, y otras carreras no llegó a finalizarlas. Y remarcaron que Carlos Reutemann nunca obtuvo el Olimpia de oro, después de ganar 12 carreras en la Fórmula 1, y de ser subcampeón del mundo en 1981.
La presencialidad terminó teniendo recompensa en este caso. Y a partir de ahí la discusión entró en escena, ya que el deportista del año lo suele determinar el Olimpia.